Opus Dei

Como ya era costumbre en cada viaje que realizaba san Josemaría, se pensaba en un menú especial, que fuera sano y además delicioso. El viaje a México no sería la excepción por lo que las encargadas de la cocina en la sede central en Roma mandaron un menú con meticulosas instrucciones de cuál sería el platillo de cada día. Aquí te contaremos cómo fue ese menú.

A los mexicanos nos encantan las bromas, y esto le consta al P. Santiago Martínez. “Padre, tengo que contarle una anécdota para que vea lo malos que son sus hijos de México”, dijo, para risas de san Josemaría, quien hasta del ingenio mexicano se aprovechaba para acercarnos a nuestra Madre del Cielo.

San Josemaría vivió el quinto día de su novenario en la Villa de Guadalupe con gran intensidad, lloró e hizo una promesa a la Virgen.

En este enlace podrás seguir en vivo la misa de acción de gracias por el 50 aniversario de la visita de san Josemaría a México

Durante las tertulias, san Josemaría transmitía siempre un ambiente de familiaridad. Francisco Fernández siempre recordará con cariño esas tertulias a las que asistió, pues "más que la reunión con un personaje, eran reuniones de familia". Y, sobretodo, siempre recordará el día que le dio un abrazo al Padre.

Durante su visita, san Josemaría predicó continuamente la fidelidad al Papa y a la Iglesia, y, especialmente la devoción a la Virgen María. Desde lo alto de una tribuna, las "tertulias" con la Morenita comenzaron.

De camino a México san Josemaría hizo una escala en el Aeropuerto de Madrid el 14 de mayo de 1970. Ahí lo entrevistaron algunos periodistas. Javier Ayesta lo acompañó esa tarde, y cuenta en una carta lo ocurrido aquellas horas. Aquí resumimos la historia.

Era Domingo de Ramos y Chela no podía esperar hasta el Viernes Santo para entregar un recado personal a san Josemaría, pues sabía que ese mensaje sería el comienzo de una gran historia.

¿Cómo se pasa a formar parte del Opus Dei? ¿Resulta posible dejar de pertenecer a la prelatura? En este artículo se detallan algunos aspectos sobre el discernimiento y las fases para la incorporación al Opus Dei, y sobre las situaciones de la salida, con algunas reflexiones sobre el fenómeno vocacional y su acompañamiento.

Paula y Alondra son de distintas ciudades, se llevan 5 años de diferencia y tienen planes de vida distintos. Sin embargo, las une su pasión por el servicio a los demás. En El Pinar reciben formación técnica y espiritual.