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Primero es Dios

En este hogar de Ecatepec, México, el Fundador del Opus Dei es sencillamente Josemaría. Como nos explica Eloísa, él aquí es portavoz, consejero y amigo. Lo que un santo debe ser.

San Josemaría y Monterrey

En 1970, el fundador del Opus Dei afirmó que "cuando volviera a México, entraría por Monterrey". No pudo regresar, pero está presente con su mensaje.

«Era un ambiente de fiesta»

A diez años de distancia, cuatro mexicanos recuerdan cómo vivieron la canonización de San Josemaría.

La sonrisa cotidiana

A raíz de una entrevista con un intelectual mexicano, el autor recuerda la alegría de San Josemaría y cómo el baile, la fiesta y la diversión son una ocasión estupenda para encontrar a Dios.

Me ha hecho muy feliz

Leticia Gómez-Tagle, pianista concertista mexicana que ha encontrado en Austria un segundo hogar, resume su trabajo cotidiano con una honda sencillez: «Mi profesión es regalar música».

«No ha pasado un solo día en el que no me ría»

A 60 años de su fundación, la Residencia Universitaria Panamericana brinda un ambiente de alegría, estudio y formación espiritual a jóvenes de todo México que han encontrado un verdadero hogar lejos de casa.

Vacaciones de verano: limpiar, pintar, ayudar

Estudiantes que reciben formación en un centro del Opus Dei aprovechan parte de sus vacaciones de verano ayudando a varias comunidades de la sierra de Puebla.

La alegría de San Josemaría

Mago Murillo, pianista, trabajó algunos años en Roma, muy cerca de San Josemaría. Entonces pudo apreciar uno de los rasgos característicos del Fundador del Opus Dei: su buen humor.

Cincuenta años de El Peñón

“Soñad y os quedaréis cortos”. Esta frase de san Josemaría es una realidad forjada a lo largo de 50 años en El Peñón, en el estado de Morelos. La comunidad escolar y autoridades civiles y eclesiásticas festejaron en grande las primeras cinco décadas de la labor que se realiza en la ex hacienda Santa Clara de Montefalco.

Cuando un camión te cae encima

José Villela, médico y miembro del Opus Dei, sufrió un accidente que lo dejó en silla de ruedas, pero supo encontrar sentido al sufrimiento y ahora sabe que todo lo que sucede es por voluntad de Dios.