Opus Dei

Raffaella es una fiel del Opus Dei que, gracias a su trabajo, vivió cerca de don Javier Echevarría en los últimos días de vida del segundo sucesor de san Josemaría. Cuenta cómo con el ejemplo de don Javier aprendió qué significa querer a los demás con el espíritu cristiano que se propone en la Obra.

Ayer, 11 de diciembre, víspera del segundo aniversario del fallecimiento de Mons. Javier Echevarría, se presentó en la Librería Neblí (Madrid) el libro de Ernesto Juliá “Instantáneas de un cambio. Javier Echevarría, Prelado del Opus Dei”, que acaba de publicar la editorial Palabra.

Cuando las primeras mujeres del Opus Dei marcharon a México a comenzar la labor apostólica, no dudaron en ponerse bajo la protección de Nuestra Señora de Guadalupe. Entre ellas se encontraba Guadalupe Ortiz de Landázuri, que debía su nombre a esta advocación mariana, pues nació el día de su fiesta.

Informaciones sobre la causa de beatificación y canonización de Marcelo Câmara (1979-2008).

Tuve que abandonar el trabajo porque resultaba incompatible con mi vida familiar y esta decisión me costó mucho.

Comencé a rezar a Isidoro porque también mi abuelo había trabajo en los ferrocarriles.

En estas fechas mucha gente espera con curiosidad el villancico del colegio Tajamar. Pero apenas se conoce la labor solidaria que 1.000 voluntarios del colegio realizan en Navidad. Alfa y Omega lo relata en el reportaje “Juguetes para los niños de Cañada Real o cenas de Navidad para víctimas de trata”.

El abogado y sacerdote Ernesto Juliá recoge en el libro 'Instantáneas de un cambio' (Palabra) una semblanza del que fue prelado del Opus Dei entre 1994 y 2016, Javier Echevarría, que asumió el cargo a la muerte de Álvaro del Portillo con el reto de ser "fiel al espíritu del fundador" en las circunstancias de ese momento.

Nos ayudó a mi novio y a mí a encontrar trabajo, por lo cual me siento muy agradecida.

Yo seguía encomendando esto a Dora porque pasaban los días y podíamos perder la oportunidad de traer los libros...