«Que sean muy fieles a Cristo»

Esta frase resume la vida de don Enrique Rúa Espada, sacerdote del Opus Dei desde 1954, que falleció el 21 de febrero en Monterrey, ciudad en la que había desarrollado una intensa labor desde 1993.

El día 21 de febrero, falleció en Monterrey a los 89 años de edad el P. Enrique Rúa Espada, a causa de una enfermedad pulmonar.

Nació en La Coruña, España, en 1925. Fue el mayor de 4 hermanos. Estudió Ingeniería Industrial, en la Escuela Especial de Ingenieros Industriales, incluido el doctorado.

Pidió su admisión en el Opus Dei el 13 de febrero de 1947. Comentaba: “mi vocación la vi con toda claridad: la entrega plena a Dios en medio del mundo, santificando el trabajo y los demás deberes diarios, era lo que Dios me pedía”. Convivió con San Josemaría en diversas ocasiones.

Fue ordenado sacerdote por el Siervo de Dios, Mons. José María García Lahiguera, junto con otros 8 miembros del Opus Dei, el 3 de octubre de 1954. “Sentí una alegría más que humana: aquello venía de Dios. Y me emocionó profundamente el pensar que ya podía celebrar la Santa Misa y absolver los pecados”, comentó en alguna ocasión al recordar el día de su ordenación.

En diciembre de 1954, don Enrique Ruá llegó a México: “Venía dispuesto a que México me gustara, pero, además, me gustó, en especial Monterrey”. Desarrolló su labor pastoral en la Ciudad de México, en San Luis Potosí y en Monterrey, Residió en la capital de Nuevo León los últimos 21 años de su vida.

Destacaba en él su sabiduría, su disponibilidad completa para atender las labores que se le pidieran, su buen humor y buena memoria, que conservó hasta el final de su vida. Un amigo suyo escribió sobre él: “Hablaba solo cuando era necesario, hacía su trabajo sin llamar la atención y rezaba todo el tiempo”. A pesar de que fue perdiendo facultades físicas en los últimos años, nunca se quejó.

En alguna ocasión mencionó: “Me gustaría decir a los sacerdotes jóvenes que sean muy fieles a Cristo, y para ello estén muy unidos al Papa, a su Obispo y sus hermanos sacerdotes. Que sean muy generosos en dedicar horas a la administración del sacramento de la reconciliación”.

Sus restos serán velados en la Residencia Universitaria Monte Real, el viernes 21 de febrero, a partir de las 16.00 horas. La Misa de funeral será en el Santuario de Ntra. Señora de Fátima el sábado 22 del presente, a las 11am. La celebrará Mons. Francisco Ugarte Corcuera, Vicario Regional del Opus Dei en México.

¡Descanse en paz!