El amor no muere nunca

Alexander Zorin, un eminente intelectual y poeta ruso, de religión ortodoxa, reflexiona en este breve ensayo sobre las enseñanzas de Josemaría Escrivá

El amor no muere nunca. Esto lo saben bien sus hijos espirituales que acuden a él en sus oraciones y reciben su ayuda desde el más allá. Sus libros -unos 6 millones de ejemplares sin contar las traducciones a lenguas extranjeras- todavía llevan a Dios en la actualidad a nuestros compatriotas. Estoy en contacto epistolar con muchos de ellos y soy testigo del carácter saludable y curativo de la predicación del padre Alexander en la Rusia actual. Es la predicación de un sacerdote ortodoxo. abierto al mundo, a la cultura y a otras confesiones.