El Dr. Gerardo Castillo, Director del Área Departamental de Ciencias Biomédicas y Jefe del Programa de Recuperación Nutricional, cuenta que la Universidad de Piura decidió centrar su atención en una de las zonas de mayor desnutrición del departamento, en el Medio Piura . En enero de 2008 se inició el Programa de Recuperación Institucional, proyecto financiado por el Gobierno de Navarra y Properú, y concluyó en diciembre de 2010.
El programa se inició al darse cuenta que existía un déficit intelectual en los niños y al percatarse que no eran suficientes los alimentos que daba PRONAA (Programa Nacional de Asistencia Alimentaria). Así es como fomentaron, principalmente en las madres, la capacidad de conseguir sus propios alimentos: se empezó con la crianza de patos y cuyes, y en el cultivo de alimentos a través de biohuertos.
Se han beneficiado 507 niños provenientes de 14 caseríos de la margen derecha del río Piura.
“Nos dedicamos a niños entre 0 y 5 años porque es la edad donde hay más deterioro cerebral si a un niño no se le alimenta bien. El daño es enorme y trae secuelas graves más tarde. Además porque en esta etapa es más riesgoso que la pobreza se convierta en un círculo vicioso”, afirma el Dr. Castillo.
¿Qué y cómo se hizo?
Como parte del programa, se elaboró inicialmente un diagnóstico del estado nutricional de todos los niños del Medio Piura menores de 5 años, así como los factores sanitarios que suelen empeorar esta enfermedad, como diarrea y parasitosis intestinal.
Con este diagnóstico se trazó un plan de trabajo que tenía los siguientes pilares: 1) Vigilancia nutricional, 2) Atención médica gratuita tanto a las madres gestantes como a los niños, 3) Recuperación del déficit intelectual, 4) Educación materna, 5) Autosostenimiento alimentario, 6) Fortalecimiento de las organizaciones comunales de base. También se ayudó a mejorar la autoestima a las madres del programa, trabajando bajo el concepto de que la mujer es la clave del proceso.
Las acciones plasmadas en resultados
En casi 3 años, se recuperó al 98% de niños en estado de desnutrición, y las madres lograron alimentar a sus hijos durante una temporada en la que el PRONAA no abasteció comida.