Agradar a Dios (IV): sé que te encantó, Jesús. Las cosas pequeñas
San Josemaría nos enseñó a cuidar las cosas pequeñas porque comprendía la capacidad del hombre de agradar a Dios con pequeños y casi minúsculos detalles realizados por amor.
Como en una película: La felicidad que nada puede quitar
Dios no solo quiere que tengamos un final feliz, si no que además quiere que seamos felices durante el camino. Con su gracia podemos acoger un estilo de vida que radica en la presencia de Cristo en nosotros.
Agradar a Dios (II): lo normal, discreto y divino. Los sacramentos cotidianos
Algunos paisanos de Jesús dudaron de que el poder de Dios pueda manifestarse en alguien "tan normal". El Señor quiere seguirnos encontrando en lo cotidiano, tejido por sencillas normas de piedad que procuramos vivir.
Trabajar bien, trabajar por amor (VII): El eje de nuestra santificación
El trabajo es, para muchos cristianos, una de las actividades principales donde buscar la santidad. San Josemaría se refería a la actividad laboral como al "quicio de nuestra santificación". Este editorial expone ese mensaje.
Los fieles laicos ante la nueva evangelización
La nueva evangelización es tarea de todos, laicos o ministros sagrados, como la misma misión de la Iglesia. Cada uno la cumple según su propia función en ella, y acompañando siempre su palabra con el testimonio de una coherente vida cristiana.
Para santificar al mundo
Han pasado 40 años desde que San Josemaría celebró la Santa Misa en Pamplona ante un cuantioso número de fieles y pronunció una homilía llamada a perdurar en el tiempo. Presentamos un artículo sobre las palabras en las que el Fundador del Opus Dei invitaba a "Amar al mundo apasionadamente".