La primera definición de santo que da la RAE es “alguien perfecto y libre de toda culpa”. Un camino quizá reservado a muy pocas personas. Para Josemaría Escrivá , sin embargo, la santidad aparece verdaderamente al alcance de todos. Después de leer sus obras, muchas personas han descubierto que también podían llegar a ser santos: desde un agricultor hasta una policía, desde un taxista hasta una profesora. Para muchos de ellos el libro “ Camino ” ha sido su gran consejero.
Celebrando los 70 años de la edición príncipe de “Camino” (Valencia, septiembre 1939), se presentó una edición conmemorativa el pasado martes 8 de diciembre en la 30ª Feria del Libro Ricardo Palma (Perú). La edición de aniversario, de mil ejemplares, fue elaborada por la asociación editorial INFOBRAX. La ponencia central de la presentación estuvo a cargo del Dr. Pedro Rodríguez, autor de la edición crítico-histórica de Camino.
¿Qué busca san Josemaría, qué le mueve a escribir y editar un libro que es ya un clásico en la literatura cristiana?, se pregunta el doctor Rodríguez. Y él mismo esboza una respuesta: “No estamos ante la decisión de un 'autor' que quiere escribir un libro, sino ante la responsabilidad de un sacerdote que se sabe portador de una misión y de un mensaje y que busca llegar a un número creciente de almas” .
La génesis del libro
Don Pedro Rodríguez explicó con detalle la génesis de un libro del cual se han difundido ya cuatro millones y medio de ejemplares, en más de 350 ediciones y en 43 idiomas distintos. Cuadernos, Apuntes íntimos, Consideraciones espirituales y otros escritos forman el proceso redaccional de “Camino” de Josemaría Escrivá. Todos ellos pensados al filo de la vida cotidiana, al filo de la experiencia apostólica de su autor.
San Josemaría se inició con Cuadernos, apuntes personales que recogían numerosas noticias de su vida espiritual, intelectual, familiar, pastoral y apostólica. El Prof. Rodríguez asegura que el Fundador del Opus Dei no anota sus Cuadernos con la intención de escribir un libro, sino que se siente impulsado a conservar, no sólo las inspiraciones de Dios –que cree son firmísimamente divinas– sino también cosas de la vida que han servido y pueden servir para su aprovechamiento universal.
“Camino” es el resultado de una irradiación espiritual y apostólica que fue creciendo poco a poco, que fue avanzando y profundizando en la formación de “nuestros amigos”, decía familiarmente. Josemaría quería empujar hacia la plenitud de la vida cristiana a los que ya habían tomado contacto con el “proyecto” que les proponía. Él decía: “Él libro se ha escrito para que 'te metas por caminos de oración y de Amor'” “Camino”, por tanto, se debe leer con un mínimo sobrenatural, de vida interior y de afán apostólico.
El hilo conductor
El propio san Josemaría explica el hilo conductor del libro: "Yo escribí una buena parte de Camino en los años comprendidos entre 1928 y 1933, y la publiqué en 1934: y, con esa publicación, traté de preparar un plano inclinado muy largo, para que fueran subiendo poco a poco las almas, hasta alcanzar a comprender la llamada divina, llegando a ser almas contemplativas en medio de la calle" .
El Dr. Rodríguez destaca "dos grandes líneas que recorren el pequeño gran libro y lo convierten en 'manual de la santidad de los laicos': la primera es el mundo, la situación mundanal del hombre y, sobre todo, su dinamismo creador —el trabajo— afirmados positivamente y contemplados en la economía de la gracia (santificación del trabajo, santificación de las actividades humanas); la segunda constituye como el eje sobrenatural de la tarea santificadora y podríamos calificarla como 'primacía de la gracia', de la oración, de la interioridad, que en el libro se expresa, ante todo, como vivencia y sentido de la filiación divina, lo que configura la espiritualidad de los laicos como 'espiritualidad bautismal'” .
Después de meditar mucho tiempo el texto de “Camino”, Mons. Rodríguez, prelado de honor de su santidad, concluye que Josemaría trató de recoger el "tesoro histórico" del Cristianismo y entregarlo al hombre contemporáneo. “Precisamente su modo de entregar el tesoro le lleva a delinear un concepto de vida cristiana en el mundo, que siendo propio de la tradición de la Iglesia, aparecía en su época como algo que se descubría por primera vez” .
Para cristianos y no cristianos
Pero los escritos de Josemaría no intentan ser exclusivos. Como se lo explicó a un periodista francés: "No es un libro para los socios del Opus Dei solamente; es para todos, aun para los no cristianos" . Josemaría habla de "millones de almas que se han acercado más a Dios Nuestro Señor", a las que califica de "amigos queridísimos" y que son "católicos y no católicos, cristianos y no cristianos" . Sin lugar a dudas, el Autor constata que los lectores del libro han trascendido todo tipo de fronteras.
Al finalizar la ponencia, Mons. Rodríguez felicitó a los editores del libro por la “imponente edición de Camino que ha sido realizada en Perú, setenta años después que la primera” . La edición de Infobrax corresponde a la sexta edición peruana. La primera edición es de 1974 y estuvo a cargo de Editorial Andina que también editó la primera edición en quechua con el título de Ñam en 1975.
En el panel de la presentación acompañaron al Dr. Rodríguez, el profesor Francisco Bobadilla, de la Universidad de Piura, y la educadora Carmela Aspíllaga, directora del colegio Montealto. Asistieron a la presentación más de 200 personas que llenaron el auditorio Julio Ramón Ribeyro.
Texto completo de la conferencia del Prof. Pedro Rodríguez
