Tres voces de Harambee

En los últimos meses Harambee ha seguido realizando diferentes actividades para promover el desarrollo en África. Recogemos algunas noticias sobre las últimas iniciativas en Gijón, Valladolid y Tarragona

1. XIV Festival musical de primavera de la Asociación cultural Prados, de Valladolid.

Clubes juveniles y asociaciones culturales promovidos por padres y madres de familia se dieron cita el sábado 2 de junio en el XIV festival de musical de primavera de la Asociación cultural Prados.

El salón de actos de Caja España se quedó pequeño para acoger a las más de quinientas personas que asistieron y participaron en esta nueva edición de uno de los certámenes musicales y juveniles más arraigados. En esta ocasión el jurado presidido por Carlos Rodríguez, director músico de la Casa de Aragón, concedió el primer premio al Club juvenil Yola, de Benavente.

 Las niñas zamoranas representaron la Comedia musical "Tarta de fresa", que narra la inventiva de tres fresas que quieren elaborar un dulce sorpresa para la reina de Dulcilandia. La autora del texto manifestó que quería resaltar los valores del trabajo en equipo y la importancia de todos aquellos aspectos que pasan muchas veces ocultos a los ojos de los demás. Ciertamente las jóvenes artistas de Yola cumplieron con sobresaliente su papel y además lucieron con soltura las horas de trabajo de sus madres, responsables del vestuario que exhibieron.

Tarta de fresa se impuso por escaso margen a otras dos comedias musicales representadas por grupos de Madrid. La Asociación La Vereda interpretó "La revolución rusa", un encuentro musical entre zaristas y bolcheviques con el Teatro de la Ópera moscovita por testigo de la historia. Se trató de una apuesta arriesgada, dado el elevado número de artistas que intervenían, y el Jurado reconoció el esfuerzo de coordinación mostrado por las representantes de La Vereda concediéndole el tercer puesto. 

"Un sueño de película", de la Asociación cultural Arboleda, de Madrid, describe el hipotético origen de las películas de Disney. Con un vestuario y puesta en escena muy cuidados, las artistas madrileñas contaron con una gran complicidad de sus familias, tanto entre las bambalinas como en el propio escenario, y algunas madres no se resistieron a actuar en papeles secundarios, quizás añorando su participación en ediciones anteriores de este mismo festival.

Otras actuaciones muy aplaudidas fueron las del Club Guadalén, de Madrid, que representó "El misterio del circo" en la modalidad infantil, y "el misterio del circo" en la juvenil; la versión de "El Principito" de Tordomar (Burgos) y "Arco iris de ilusiones", una comedia musical de la Asociación Nogales (Talavera de la Reina). 

Durante la deliberación del jurado, la entidad anfitriona, la Asociación cultural Prados, puso en escena dos obras de teatro y dos bailes, al tiempo que presentaban sus actividades para este verano, como campamentos, convivencias o un campo de trabajo solidario en Polonia.

Esta vertiente solidaria de Prados también estuvo presente en el Festival, donde los asistentes pudieron conocer y colaborar con los proyectos que Harambee, un fondo internacional de ayuda a proyectos de desarrollo en África que se puso en marcha en la canonización de San Josemaría. La presentadora agradeció en nombre de la Dra. María José Soga, coordinadora de Harambee en Castilla y León y presente en el acto, la colaboración de Prados con estas iniciativas.

2. La asociación Harambee da a conocer en Asturias sus proyectos de ayuda en África 

La coordinadora nacional del proyecto internacional Harambee, Margarita Valenzuela, presentó ayer en la Biblioteca Pública Jovellanos los trabajos de esta asociación, nacida en 2002 en Roma para impulsar la colaboración con instituciones y oenegés africanas en diversos proyectos de desarrollo. Harambee, que en swahili significa «todos a una», está presente en España, Italia, Francia y Estados Unidos y ya ha financiado 14 proyectos en 24 países del África subsahariana. 

Según explicó Margarita Valenzuela, la labor de Harambee tiene principalmente dos líneas de trabajo: «Por un lado nos encargamos de financiar los proyectos de diferentes asociaciones africanas y, por otra, pretendemos dar a conocer la cara más amable del continente, para que no se vea sólo como un lugar de hambre y miseria, sino lleno de gente con grandes valores, cargada de confianza y con mucha ilusión por ir hacia adelante». 

La principal característica de Harambee, que la distingue de otros movimientos de ayuda al tercer mundo, es su intención de que sean las propias asociaciones africanas las que trabajen por su continente, en lugar de trasladar a gente desde aquí. «Creemos que ellos son capaces y queremos darles confianza. Nosotros financiamos sus proyectos, pero todo lo hacen instituciones de allí, con gente que vive y que trabaja allí». 

Para colaborar con estas asociaciones, Harambee cuenta con un fondo de ayuda que se nutre de donativos y de las aportaciones de sus socios y que actualmente permite mantener en marcha diversas iniciativas en países como Sudán, Kenia, Madagascar y la República Democrática del Congo. En los últimos años, además, han colaborado con diferentes programas como uno de reinserción de niños soldado en Sierra Leona, otro de ayuda a las mujeres musulmanas en Sudán y otro de reciclaje de maestros rurales en Kenia, «un país donde el aumento de alumnos tras la implantación de la escolarización obligatoria no fue acompañada de una mejora de la plantilla docente». 

Los fondos de Harambee se canalizan a través del Instituto de Cooperación Universitaria (ICU), que se encarga de seleccionar los proyectos que serán financiados, «buscando siempre oenegés sólidas y que hagan un buen trabajo». 'Comunicar África' Por otra parte, a través de su programa 'Comunicar África' la asociación realiza diversas actividades para dar a conocer el continente negro. Además de exposiciones y conferencias, organiza concursos escolares y un premio internacional de documentales.

3. Harambee acerca África a Tarragona

Como cada año, el colegio Turó de Tarragona ha celebrado el Día de las Familias. Los alumnos de bachillerato han querido aprovechar la ocasión para dar a conocer y colaborar con un proyecto solidario: Harambee.

El curso anterior los alumnos del colegio también habían llevado a cabo una actividad solidaria y querían continuar con esta tradición. “Este año, el curso nos ha pasado muy rápido y hasta el último momento el consejo de curso no decidió nada con el tutor”, explica Oriol Ferré, alumno de bachillerato que coordinó la iniciativa.

Finalmente y en medio de los exámenes finales de bachillerato, creímos oportuno continuar con la tradición del proyecto solidario e informamos sobre diferentes ONG”.

Después de deliberar, prosigue Oriol, “elegimos Harambee”.

Harambee nació en 2002 con motivo de la canonización de San Josemaría, gracias a los donativos de los participantes en las ceremonias y de muchas otras personas. Promueve iniciativas de educación en África y sobre África, a través de proyectos de desarrollo en el área subsahariana y de actividades de sensibilización en el resto del mundo, con el objetivo de difundir los valores, las cualidades y las posibilidades de futuro de la cultura africana. 

Desde entonces ha colaborado con 24 proyectos en 14 países: Burkina Fasso, Camerún, Costa de Marfil, Guinea Bissau, Kenia, Madagascar, Mozambique, Nigeria, República Democrática del Congo, Ruanda, Sierra Leona, Sudáfrica, Sudán y Uganda.

Los proyectos de Harambee para el 2007 son cuatro: un programa de inserción laboral en Madagascar, tres dispensarios de urgencias pediátricas del hospital Monkole en la República Democrática del Congo, un centro de formación profesional para mujeres en Sudán y un proyecto de formación para maestros de la escuela IEHDS-Strathmore University en Kenia.

Una ayuda para Monkole

Nos centramos en el Proyecto de Monkole. Explicamos, por carta, a todos los padres el proyecto, animándolos a colaborar”, dice el Oriol. La ocasión fue el Día de las Familias que anualmente organiza la escuela, un encuentro de  familias al completo -padres, hijos, abuelos,...-, amigos y un buen grupo de antiguos alumnos.

Nos pilló el fin de semana de exámenes, pero algunos pudimos dedicar buena parte del día a la recogida de dinero. ¿Cómo lo hicimos? Algunos se quedaron alrededor del standy explicaban a los padres lo que estábamos haciendo. Otros se dedicaron a ir por la escuela a perseguir a las familias para explicar el proyecto y para que comprasen pulseras Harambee, como una forma de contribuir con una pequeña ayuda. El viernes anterior a la fiesta, unos amigos míos de 1º de ESO, Miquel y José María, me pidieron ayudar en el Proyecto. ¡No me lo creía! Habían pensado hacer una rifa vendiendo números para sortear camisetas del Nàstic y otros objetos y una camiseta del Reus (para evitar rivalidades entre las dos aficiones futbolísticas de la provincia). Todo un éxito. Nos espabilamos para lograr los boletos con los números y venderlos durante todo el día”.

Una forma muy clara de cooperar es comunicar y los alumnos del Turó lo hicieron muy bien. Al Día de la Familias acudieron 1608 personas y se vendieron 375 números en rifa solidaria.