El programa de actos de Torreciudad incluyó la entrega de premios y trofeos, el rezo del rosario en romería con la Virgen de los Deportistas y la celebración de la Eucaristía. Después del almuerzo campestre en la explanada la mayoría de los participantes emprendieron el regreso. En su bienvenida el rector del santuario, D. Javier de Mora-Figueroa, mostró su alegría por "la coincidencia con el 10 aniversario de la canonización de san Josemaría. Hoy vemos a tantos que vienen a buscar a la Virgen y gracias a san Josemaría tenemos a la Virgen en Torreciudad".
Un total cercano a los mil quinientos participantes se animó este año a correr uno o más relevos, como es el caso del bombero portugués Ernesto Monteiro, que ha corrido con su grupo de 12 corredores entre dos y tres relevos cada día. El vallecano Faustino Pablo, de 64 años, suele correr ocho relevos, con la particularidad de que no ha fallado ningún año desde la primera edición. El tiempo medio de cada relevo ha sido de 50 min. y han podido seguirse en Twitter en @Tajamar500kms .
La carrera ha pasado por las provincias de Madrid, Guadalajara, Soria, Navarra, Zaragoza y Huesca. La salida del jueves en Tajamar contó con la presencia de Pepu Hernandez, ex seleccionador de baloncesto, la atleta Nuria Fernandez y Adelardo Rodriguez, presidente de la Fundacion Atlético de Madrid.
Muchas familias y niños en la meta de Torreciudad, con alta participación en el último relevo desde El Tozal, de cuatro kilómetros. Junto al relevo se celebra una carrera, y la primera mujer ha sido Mariola Villalón, 17 años, que estudia 2º de Bachillerato, y que ha hecho la subida de 3.8 km en 20 minutos. Mariola ha venido con su familia y un grupo de amigas. "Estoy un poco matada, porque he hecho también el relevo de las 4 de la madrugada, y ahora esta subida para completar. Pero vale la pena claramente, aunque la verdad es que si no tienes a alguien al lado, te paras y no aguantas".
Con Mariola está Loreto Ferrer, que estudia 1º de Bachillerato en el colegio Orvalle , "estoy muy contenta por el esfuerzo hecho, creia morir, pero menos mal que iba arropada". Nos dice que es un buen día para pedir muchas cosas a la Virgen, "especialmente por la crisis". Su plan es volver cuanto antes a Madrid, que "hay que estudiar". Con ella está María Hammer, 16 años, la llaman Titu, y cuenta que "estoy disfrutando mucho", "hemos dormido en el autobús", "repetiré, es mi primera vez".
Entre los más pequeños hemos saludado a Nuria Arrufat, estudiante de 5º de Primaria, y que ha venido con toda la familia desde Las Rozas. Rosa María es otra amiga de 11 años, y es la primera vez que corre, lo mismo que David Barreriro, 10 años, cuyo padre ha corrido el último relevo. Otro compañero es Ernesto Parras, 10 años, al que la subida desde El Tozal le ha costado "un poco".
El grupo de doce ciclistas tiene bien trabajada la ruta, con primera etapa de 198 kms. desde Vallecas a Almazán, una segunda de 220 hasta Ayerbe, y los cien restantes hasta Torreciudad. Angel Jareño, administrativo de 54 años, lleva tres ediciones, "soy amigo de Tajamar", y se alegra porque no han tenido ni frío ni viento en la falda del Moncayo. Otro ciclista es José Antonio Garayalde, 62 años, también administrativo, en plena forma, dispuesta a "luchar, con ilusión, con ganas de nuevos objetivos y llegar a un lugar tan especial como Torreciudad". Saludamos también a Miguel, 52 años, que trabaja en artes gráficas y que viene a "disfrutar con los amigos".
La intendencia
El éxito de la carrera tiene detrás a un montón de voluntarios que suele pasar inadvertido. Ramón Jiménez lleva un coche de apoyo para los ciclistas. La vinculación de este taxista de 58 años residente en Rivas Vaciamadrid con la carrera viene de lejos, ya que sus hijos se formaron en el club deportivo de Tajamar . Lleva 15 ediciones y cuenta que "hay que estar un poco loco para hacer esto", pero "la que atrae es la Virgen, además de las amistades que puedes hacer, que son de las de fiar".
Su esposa Sara Zurdo forma parte del equipo de intendencia, con una docena de voluntarias que se desplazan con la carrera, a las que se añaden otras que no viajan. "Tenemos un puntos fijados para avituallamiento, comidas y cenas, y sentimos el calor popular por todos los pueblos que atravesamos, como por ejemplo anoche en la cena de Ayerbe". "No obstante, para mí, lo principal es la protección de la Virgen, ya que nunca hemos tenido ningún percance".
El camión trailer de 92 m3 que conduce su propietario Luismi Sánchez es la gran solución para el transporte de todos los materiales. "Ya me gustaría colaborar más", nos dice este autónomo que traslada entre otras cosas 4000 litros de bebidas o 400 kg. de fruta.
Lázaro Linares, director deportivo, cuenta que "este año nuestra principal motivación ha sido hacer una ofrenda y una plegaria para que pase este crisis y por tantas familias sin recursos y tantos parados". Lázaro explicó en la llegada de Torreciudad que "la Virgen nos ha protegido de nuevo y nos ayuda a superar todas las dificultades".
