Juan José Omella, obispo de Barbastro

"El beato Josemaría fue un barbastrense universal, que siguió las huellas de Cristo proclamando, y viviendo, la llamada universal del Señor a la santidad".

"Dios está en medio de su pueblo, que le acompaña en su peregrinar diario, que sufre y goza con los sufrimientos y gozos de su pueblo. Cada vez que se construye un templo, Dios se hace presente en la ciudad de un modo nuevo".

"Una sociedad tan secularizada como la nuestra necesita signos de la eternidad, de lo no caduco y pasajero, signos que le recuerden que hay una presencia amorosa que lo invade todo, lo penetra todo y lo transciende todo".

Ambrosio Echebarría, obispo emérito que inició la construcción de la parroquia

"El beato Josemaría está en el Cielo. Además, es hijo adoptivo de esta ciudad y un modelo de santidad para todos sus vecinos. Era de justicia que le dedicáramos a él la nueva parroquia".

"El beato, en vida, se interesó y amó mucho Barbastro. Ahora, desde el cielo nos asistirá en nuestro empeño cristiano. Recurrid a él en todas las necesidades, acudid seguros de su intercesión, que nos protegerá".

Javier Echevarría, prelado del Opus Dei

"Os animo a ser piedras vivas, porque la parroquia será ahora lo que vosotros queráis que sea. Recurrid en ella especialmente al sacramento de la Penitencia y de la Eucaristía".

"Doy las gracias a la iglesia diocesana por dedicar este templo a un barbastrense universal que amó profundamente a su tierra natal, al tiempo que colaboró en la solución de problemas presentes en todo el mundo. Espero que esta primera iglesia dedicada al beato en España sea semilla para que haya muchas más".

"El centenario del beato Josemaría que celebraremos dentro de un mes no es un recuerdo para una efemérides, sino una mirada hacia el futuro, como el quería, sabiendo que todos tenemos que hacer Iglesia".