Un “camino” que continúa

Los puntos de Camino que el fundador del Opus Dei escribió en Burgos hace casi un siglo, hoy toman vida en la amistad de dos sacerdotes de la parroquia de San Josemaría de esta ciudad castellana.

La parroquia de San Josemaría en Burgos continúa parte del legado que el fundador del Opus Dei dejó a su paso por la ciudad del Arlanzón, mientras esperaba el final de la guerra civil española.

Ochenta y cinco años después, los puntos de Camino —libro que terminó de escribir en la capital burgalesa—, se convierten en una de las herramientas para recaudar fondos que sustenten el templo.

Fueron años difíciles, de espera y de crecimiento interior fuerte. Fruto del trabajo y de la oración de san Josemaría, Camino se ha traducido hoy a más de 50 idiomas y se han publicado más de 5 millones de ejemplares. Algunos de sus puntos, recogen aquella etapa de paso, donde el fundador del Opus Dei se rodeaba de los primeros miembros de la Obra y paseaba por las riberas del Arlanzón organizando los pasos para la organización y expansión tras la contienda.

Ochenta y cinco años después, los sacerdotes José Luis Tapia y Óscar Gómez Cantero recogen el testigo de aquellos primeros miembros del Opus Dei y trabajan para que la parroquia de San Josemaría sea un punto de luz; un lugar de encuentro con Dios en uno de los barrios más jóvenes de Burgos.

Parroquia de san Josemaría (Burgos)
Parroquia de san Josemaría (Burgos)

Con motivo de la festividad de san Josemaría, reflexionan sobre la figura del Fundador, el impacto de su mensaje en sus vidas y el sentido de su sacerdocio. Recorren los lugares por los que paseó durante su época burgalesa y valoran el legado espiritual que sus oraciones y su trabajo en aquella época dejaron a la ciudad.

Recibir el encargo de levantar una parroquia y dar continuidad a su actividad no es tarea fácil. Ambos responden con sentido del humor, optimismo y propuestas ambiciosas para recaudar fondos que les ayuden a pagar las deudas contraídas para lograrlo. Aquí vuelve a tomar protagonismo Camino. Como explica don José Luis, quien lo desee puede comprar el punto de Camino con el que más se identifique y ayudar a completar el mural de 999 puntos que se sitúa en la planta baja de la parroquia. Cada uno deja así su propio testimonio y contribuye a aliviar la economía de la parroquia.

El templo es moderno, muy amplio y se llena de luz constantemente para acoger a quien quiera acercarse a los sacramentos, encontrar un momento de silencio y de oración o incluso descansar del ritmo que marca el Camino de Santiago. Como señala don José Luis, “en la parroquia ayudamos a que, quienes lo quieran, encuentren una luz dentro de este jaleo en el que nos movemos.”

En este sentido, parte de la serenidad y el sosiego que ofrece el templo está bajo la mirada de una figura muy paternal y original de san José con el Niño.