El centro cultural Entrearcos cumple ahora 25 años. El beato Josemaría quiso que lo que fuera su casa natal se convirtiera en un instrumento formativo, abierto a todos los barbastrenses, y así queda constancia escrita –en una carta de finales del año 1972-: “No era razonable dejar en esa querida ciudad de Barbastro una especie de memoria mía personal. Porque es mejor preparar un nuevo instrumento, aunque sea modesto, que sostenga vivo en Barbastro el espíritu que yo he recibido de Dios”. El beato Josemaría quería que este centro cultural sirviera para trabajar habitualmente por las almas y contribuir “a hacer cada vez más cristiano a mi pueblo”.
Desde 1977, Entrearcos ha realizado diferentes iniciativas de formación humana y cristiana a las que acuden personas no sólo de Barbastro capital, sino de toda la Comarca del Somontano, así como de la Sobrarbe y la Ribagorza.
En el año del centenario
El centro cultural Entrearcos ha querido recordar su íntima relación con Josemaría Escrivá de Balaguer a través de una lápida que recuerda el nacimiento del beato barbastrense en esa misma casa.
El texto de la placa dice:
“Al cumplirse el centenario del nacimiento, en esta casa, del beato Josemaría Escrivá de Balaguer y Albás, siervo bueno y fiel, sus hijas e hijos manifestamos nuestra gratitud a Dios Uno y Trino por los grandes dones humanos y espirituales que concedió a nuestro queridísimo Fundador, por la fecundidad admirable de su alma sacerdotal y la difusión universal de sus enseñanzas. Evocamos también con particular cariño a sus padres, don José y doña Dolores, que proporcionaron siempre al beato Josemaría el ejemplo amable y recio de su vida hondamente cristiana”.
“En unión con su primer sucesor Mons. Alvaro del Portillo, que tanto ayudó en la promoción de este Centro, y con el Prelado del Opus Dei, Mons. Javier Echevarría, pedimos al Señor, a través de la intercesión de la Virgen Santísima, que bendiga con su gracia divina el servicio que los fieles de la Prelatura -sacerdotes y laicos- prestan a la Iglesia en los cinco continentes, mediante la santificación del trabajo profesional y de los demás deberes ordinarios del cristiano. Barbastro, 9 de enero de 2002. Laus Deo Beatissimaeque Virgini Mariae!”.
El acto de inauguración de la placa terminó con una conferencia de la periodista Covadonga O´Shea sobre “La mujer y la familia en la enseñanza del beato Josemaría”.