“Desde aquí” o “desde allí”

Entrevista a la profesora Marie Louisse de Abidján (Costa de Marfil)

¿Cómo está la situación en Costa de Marfil?

Actualmente hay tranquilidad. Estamos en fase de “reconciliation nationale”. Es un buen momento para mirar hacia el futuro y perdonar los errores del pasado.

¿Cuáles son las necesidades más urgentes?

Formación. En todos los aspectos. Hay mucha juventud, mucha ilusión; pero hay que orientar acerca de los fines que se proponen –también los trascendentales- y de los medios para conseguirlos. En esto Occidente nos puede dar muy buenos ejemplos, pero otras veces nos puede confundir. La juventud africana tiene que encontrar ideales por los que valga la pena vivir... Sólo el cristianismo da la formación integral que se necesita para ser felices y hacer felices a los demás.

De las personas del Opus Dei que conocí en la Universidad me sorprendía la formación tan profunda y la alegría que tenían. Hablábamos mucho y un día pregunté dónde y cómo se podía adquirir toda esa formación. Me indicaron un Centro de la Obra, y allí descubrí mi vocación.

¿Usted es profesora de algún centro educativo en Abidján?

Soy Licenciada en Psicología por la Universidad y estoy haciendo el Doctorado; pertenezco al Comité Directivo del Centro Educativo Yaraní para chicas con pocas posibilidades económicas. Allí se estudia hostelería y formación profesional. Se cuidan también muchos otros aspectos de la formación: hogar, higiene, cultura, etc. Y, por supuesto, le damos mucha importancia a la formación humana y espiritual.

¿Qué proyectos tienen actualmente?

Lo más inmediato es la ampliación del Centro de Salud, pues la demanda es muy superior a los medios que ahora tenemos. Queremos hacer una Clínica, con la intención de que llegue a ser un buen hospital, con centro de educación de enfermeras, maternidad, etc. También queremos abrir un colegio con todas las etapas: primaria, secundaria y superior.

¿Cómo podemos ayudar desde aquí?

Bueno... “desde aquí” o “desde allí”. Lo digo porque un grupo de jóvenes de Málaga van a ir allí a un campo de trabajo que hemos organizado para que colaboren en campañas de vacunación y de alfabetización, etc. Tienen mucha esperanza en los frutos del campo de trabajo. “Desde aquí” se puede ayudar, como es lógico, con el medio más importante que tenemos los creyentes: la oración. Después, estamos necesitados de medios económicos y de medicinas.

¿Hay decisiones de mayor compromiso cristiano en África?

Sí, gracias a Dios. Los jóvenes, como ya he dicho, en cuanto reciben formación buena, la valoran y se comprometen de una u otra forma. Es como la tierra africana: basta echar la semilla y enseguida prende y da cosecha.