Opus Dei

Hace 38 años falleció en Roma Josemaría Escrivá de Balaguer. Desde aquel día, su fama de santidad empezó a extenderse por muchos rincones del mundo y en el año 2002 Juan Pablo II lo declaró Santo de la Iglesia Universal. En los últimos años, la devoción a San Josemaría se ha extendido más todavía gracias a su presencia en los nuevos soportes digitales.

Presentamos algunas informaciones sobre el Siervo de Dios, Mons. Álvaro del Portillo, a quien la Santa Sede le ha atribuido el milagro de la curación de un niño en Chile.

La Santa Sede ha reconocido como milagrosa la recuperación del niño José Ignacio Ureta Wilson tras un paro cardíaco de más de media hora, acaecido el 2 de agosto de 2003.

Hace ocho años Ángel se metió la prueba de acceso a la Universidad en el bolsillo y voló hacia Croacia desde Tenerife. Entraría en la universidad, pero no en la que tenía más cerca. Desde entonces han pasado muchas historias. Ahora es licenciado en matemáticas y coordina los proyectos europeos de la ONG Dignidad y Esperanza con sede en Zagreb.

El papa Francisco animó ayer, especialmente a los jóvenes, a ser cristianos con valentía y a "andar contracorriente". Y explicó que existe "el martirio cotidiano, que no comporta la muerte pero que también es un «perder la vida por Cristo», cumpliendo el propio deber con amor, según la lógica de Jesús".

Declaraciones de Mons. Javier Echevarría, Prelado del Opus Dei, al conocer la noticia de la aprobación de los milagros atribuidos a Juan Pablo II y Álvaro del Portillo, y de la decisión del santo Padre sobre la canonización de Juan XXIII y sobre otros procesos.

La Santa Sede atribuye a la intercesión de don Álvaro la recuperación del niño José Ignacio Ureta Wilson tras un paro cardíaco de más de media hora, acaecido el 2 de agosto de 2003.