Rome Reports Finaliza la fase instructora de la causa de canonización de Dora del Hoyo
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Mons. Javier Echevarría, Prelado del Opus Dei.
"Dora era muy femenina. Tenía una personalidad sólida y era una seria y gran profesional. Respetuosa y atenta con todos, a los que quería mucho. Rezaba con sinceridad todos los días”.
En la ceremonia conclusiva de esta primera fase del proceso se recopilaron los testimonios recogidos sobre la vida de Dora del Hoyo, sus virtudes y su fama de santidad. El trabajo ha llevado cuatro años y lo ha hecho a cabo un tribunal de la Prelatura del Opus Dei. Los documentos ya están en la Congregación para las Causas de los Santos del Vaticano, donde los estudiarán para decidir si puede continuar el proceso de canonización.
Mons. Joaquín Llobell, Juez Instructor del Proceso.
"Mi cargo en este proceso es ser Juez Instructor. Es decir, la persona que (nombrado por el Prelado, que es como el Obispo del Opus Dei) se encarga de recoger las pruebas sobre la vida de Dora y sobre las virtudes de Dora, recoger pruebas para que luego la Congregación de las Causas de los Santos y el Papa puedan juzgar”.
Mons. Miguel Ángel Ortiz, Promotor de Justicia.
"La impresión que saco es esta: Una persona entregada, con una única ilusión, que es servir a los demás, luchando con sus limitaciones, contando con la ayuda de la gracia, ilusionada con este objetivo de ser santa, sirviendo a los demás”.
Muchos de los asistentes conocieron a Dora del Hoyo, quien falleció en el año 2004. También había muchas personas que, como ella, trabajan en las labores domésticas y familiares de los centros del Opus Dei.
Lilian Mudimba
"Dora amaba hacer las cosas bien hasta el más mínimo detalle. Por eso le pido ayuda. Por ejemplo, cuando debo hacer un pastel con una receta nueva. Pienso: 'Dora, por favor, esto tiene que salir bien. Ayúdame'. Y lo hace. Siempre que le pido algo, las cosas salen bien”.
Mons. Javier Echevarría, Prelado del Opus Dei."Con mucho agradecimiento al Señor porque vuelvo a tocar con mano directísimamente, cómo una persona que hizo cosas extraordinarias sin haber hecho nada de extraordinario, así, llevando todo lo que hacía al terreno sobrenatural. Me parece que es un día de acción de gracias, y aprender de la realidad que el cristiano se hace en la vida corriente”.
El proceso de canonización es largo y las causas que se están estudiando no son pocas: en el Vaticano hay al menos otras 400. Lo único que puede acelerar el proceso sería constatar una rápida extensión de la devoción a Dora del Hoyo en los próximos meses o años.