A pocas semanas de su gran show, en un emotivo vídeo, Juanse, una de las figuras más destacadas del rock argentino, rememora inolvidables momentos compartidos de la mano de los más grandes artistas de nuestro país como Luis Alberto Spinetta, Charly García, Fito Páez y Calamaro. “Se supone que después de haber grabado 35 discos, soy músico”, declara con humor el líder de una banda que llevó la música argentina a lo más alto, tocando con leyendas del rock internacional como The Rolling Stones, Aerosmith, Kiss, AC/DC, y que acompañó la cortina musical del talk show Videomatch durante varios años en los 90.
“Ofrezco mi dolor porque sé que algo bueno siempre va a pasar”
Con más de 40 años de trayectoria, Juanse explica en un vídeo en Instagram, que muchas veces el trabajo de un músico puede ser extenuante: “Vamos de gira a España, pasamos por Córdoba, volvemos a Buenos Aires, salimos a Montevideo. No me quejo. El que pone la jeta soy yo y tengo que trabajar”. A pesar del cansancio que provocan las largas giras, encuentra un sentido más profundo en su trabajo: “Ofrezco mi dolor porque sé que algo bueno siempre va a pasar”.
“La figura de san Josemaría me parece increíble porque es una figura moderna”
Autor de éxitos como “Rock del Gato” o “Vicio”, este músico del barrio Villa Devoto (Buenos Aires) entrelaza su música con sus creencias católicas: “Yo soy un artista que expone permanentemente mi fe”, dice y recuerda su divertido paso por Masterchef donde pudo salir en el prime time de la televisión argentina exponiendo con orgullo la cruz que lleva colgada del cuello.
En el video, Juanse habla de la influencia que ha tenido en su vida el mensaje de san Josemaría, el sacerdote español fundador del Opus Dei: “La figura de san Josemaría me parece increíble porque es una figura moderna, con la que nosotros podemos estar cerca. Es como san Pío, como san Juan Pablo II”.
Recordando el legado del santo que visitó Argentina hace 50 años y en quien encuentra inspiración, explica: “San Josemaría no está físicamente presente entre nosotros, pero dejó algo que sí se puede palpar: el amor a nuestro trabajo y a nuestra familia. Nos enseña que nunca tenemos que olvidarnos de que somos hijos de Dios”.
“San Josemaría dejó algo que sí se puede palpar: el amor a nuestro trabajo y a nuestra familia”
Emocionado, evoca la memoria de su gran amigo y músico Spinetta: “Es como un familiar para mí, lo acompañé hasta los últimos momentos. Como en mi comunidad hay mucha agua bendita, yo se la llevé”. Y recuerda, con una mezcla de nostalgia y alegría, cómo Cata Spinetta le contó que una madrugada el Flaco, su padre, la llamó y le dijo: “Traeme el agua que me trajo Juanse”. Y al escuchar la historia, nosotros, espectadores, no podemos evitar imaginar una risa que no se calla con nada.