Entrevista a los nuevos Vicarios de la Región del Caribe

La nueva Región del Caribe fue conformada recientemente y está compuesta por cuatro países: Puerto Rico, República Dominicana, Trinidad y Tobago y Venezuela. Los nuevos Vicarios cuentan, en una entrevista, los nuevos retos y oportunidades que tienen por delante.

Vicario Regional y Vicario Secretario de la Región del Caribe

Pocos días atrás se publicó, desde esta web, la decisión del Prelado de conformar la nueva Región del Caribe, compuesta por cuatro países: Puerto Rico, República Dominicana, Trinidad y Tobago y Venezuela.

Con ocasión de ello, el Vicario Regional —nombrado para esa circunscripción— el Pbro. Ignacio Rodríguez Mayz, y el Vicario Secretario, Pbro. Luis Armando Silva Ortiz, fueron invitados a un programa de la radio de la Universidad Monteávila para explicar las razones de esta decisión, las implicaciones y los retos que tiene el Opus Dei en estos países tras su unión en la Región del Caribe. Por otra parte, dan detalles del desarrollo de las Asambleas Regionales, llevadas a cabo durante las últimas semanas en Venezuela y con representantes de los cuatro países; y la proyección de la labor apostólica y formativa que surgió de esos días de trabajo.

A continuación, se puede leer un resumen de la entrevista o ver la intervención completa en este video:

¿Qué representa para la Prelatura del Opus Dei, la unión de estos cuatro países? ¿Por qué y para qué estos cambios?

Creo que más que hablar de qué representa para la Prelatura esta unión, es más importante hablar de qué significa para cada uno de los miembros del Opus Dei de estos cuatro países: sin duda es un reto, que nos tiene que llenar de ilusión y de optimismo y, a la vez, significar un nuevo impulso para todos para acercar a mucha más gente a Dios, a través de la Obra.

Estos cambios se enmarcan dentro del plan de mejoramiento del impulso y coordinación de las labores apostólicas que está llevando adelante el Prelado desde hace un par de años, y que se ha concretado, en bastantes lugares ya, en la reorganización de algunos territorios. El Prelado se ha propuesto simplificar un poco las estructuras del gobierno del Opus Dei, para dar prioridad a la atención de las personas: tanto a los miembros de la Obra como a todos aquellos que participan de nuestras actividades.

¿Qué ventajas y oportunidades representa esta unión en una sola Región para el Opus Dei?

Como decía en la pregunta anterior, esperamos que esto signifique un mejoramiento concreto en la atención de las personas, a través de una mayor cercanía. Esperamos conseguir esto al disponer de más gente para dedicarse a la atención de los demás y solo los indispensables en las labores propiamente de gobierno.

Es muy bonito y alentador ver cómo la preocupación del Prelado es la prioridad de las personas, que cada uno se sienta más atendido, para que esté en condiciones de trabajar mejor y hacer más apostolado.

Para una persona común: miembro del Opus Dei, Cooperador o allegado, ¿en qué afecta y qué debería significar esta reestructuración?

En su vida diaria, no debería significar ningún cambio. En lo espiritual, en cambio, esperamos que signifique un impulso para cada uno de nosotros ser más santos y ser capaces llevar el mensaje del Opus Dei a más personas y ambientes.

En su mensaje, el Prelado afirma que la razón de esta reducción de estructuras se orienta hacia un mayor cuidado de la persona, ¿en qué sentido una cosa afecta a la otra, pues no parece evidente la relación?

La misión principal del Opus Dei es dar formación a muchísimas personas, miembros de la Prelatura o amigos. Y en la medida que más personas estén disponibles para dar esa formación, lograremos cuidar más a todos. Allí está la relación entre una cosa y la otra. A veces las estructuras de gobierno complicadas o demasiado amplias nos ocupan o distraen de lo verdaderamente importante que son las almas. Eso es lo que el Prelado se ha propuesto y nos ha propuesto: que nos enfoquemos en lo verdaderamente importante, que es acercar las almas a Dios, a través del carisma propio del Opus Dei que es la santificación del trabajo y de la vida ordinaria.

¿Cuáles son los principales retos que asumirá en esta nueva circunscripción del Caribe?

El reto principal siempre es el mismo, que es el que nos enseñó San Josemaría y en el que nos han seguido insistiendo sus sucesores: que cada uno de nosotros crezca, cada día, en su cercanía con Dios y en su testimonio de vida cristiana. Que seamos mejores, y que vivamos con más delicadeza el carisma del Opus Dei.

Los demás retos los vamos marcando según el momento, el país y las circunstancias. Tenemos retos generales de la Región del Caribe, que tienen que ver con el desarrollo de algunas labores apostólicas, y ¿por qué no decirlo? retos de cada país, de cada Centro de la Obra y, sobre todo, de cada persona, en cuanto a la formación de muchas más personas y con mucha más profundidad.

Asambleas Regionales 2024

Sabemos que hace algunas semanas se llevaron a cabo las Asambleas Regionales para Venezuela, República Dominicana y Trinidad&Tobago, ¿en qué consistieron esos días de trabajo, cuál era su finalidad y quiénes participaban?

Las Asambleas Regionales son unas reuniones de trabajo previstas por San Josemaría, que tienen lugar más o menos cada diez años en todas las circunscripciones de la Obra. Las convoca el Prelado y de ellas salen las líneas generales que orientarán el trabajo del Opus Dei en los siguientes años, en cada Región. Van de la mano, por supuesto, de todas las orientaciones que va dando el Prelado para toda la Obra.

En esta ocasión, como se ha publicado bastante en las redes sociales, han tenido lugar como culminación de un proceso de escucha al que nos convocó el Padre, para preparar el centenario del Opus Dei, que celebraremos en 2028. La idea es preguntarnos cómo podemos servir mejor a la Iglesia, a la sociedad y a la Obra, desde nuestro propio carisma. El Padre nos ha pedido que nos preguntemos cuál puede ser el legado que deje este aniversario y, para eso, lo tenemos que preparar muy bien y haciendo que todos tengan parte.

Las Asambleas se tuvieron por separado, primero la de las mujeres y luego la de los hombres, y a cada una asistieron unas 65 personas, donde estaban representados miembros de la Obra de todas las edades, de los tres países y de todas las circunstancias en las que se puede vivir la vocación al Opus Dei.

¿Puerto Rico tuvo participación? ¿Tendrá también su propia Asamblea Regional?

Tuvimos la alegría de que vinieran como invitados, a las dos asambleas, personas de Puerto Rico. Ellos no han celebrado todavía su Asamblea, por lo que en los próximos meses se tendrán allá unas jornadas de trabajo similares a las que tuvimos en Caracas, quizá más sencillas en cuanto a organización, pero respondiendo a las mismas preguntas y teniendo la seguridad de haber escuchado a todos los que deseen participar.

¿Cuál fue el resultado de las Asambleas Regionales; cuáles son los próximos pasos y, usted como Vicario, hacia dónde proyecta la labor del Opus Dei en esta nueva circunscripción?

El resultado de cada una de las Asamblea son unas conclusiones finales, que están ahora sujetas a la aprobación del Prelado, para que queden firmes y nos pongamos a trabajar en las líneas de acción y objetivos concretos. Aunque no se deben hacer públicas todavía, porque -como dijimos- el Padre debe aprobarlas, sí puedo adelantar que tenemos campos de acción muy retadores y que nos llenan de entusiasmo. Hay propuestas, por ejemplo, en materia de mejoramiento de las labores apostólicas para que, conservando intacto su mensaje, se adapten más a los tiempos y medios tecnológicos actuales; otras en la promoción de iniciativas de tipo social; también nos proponemos mejorar en los modos de impartir la formación y de comunicar las actividades del Opus Dei, etc. En fin, es como decía nuestro Fundador, un mar sin orillas.

¿Cuál es el rol del Vicario Secretario y en qué consiste su labor en el gobierno de la Región del Caribe?

Las personas que trabajan en la Comisión Regional, órgano de gobierno, tienen como tarea ayudar al Vicario Regional. Esos cargos están divididos por departamentos y cada uno tiene una labor específica. En el caso como Vicario Secretario mi trabajo va de la mano con la de la Asesoría Regional, la dirección y proyección de la labor de apostolado de las mujeres.

Además, soy capellán de la Universidad Monteávila. Una labor pastoral que me ilusiona mucho con gente jóven. Desde la capellanía se ayuda a la comunidad universitaria: alumnos, profesores, personal administrativo, etc. a conocer a Jesucristo y la doctrina cristiana, en definitiva acercarlos más a Dios. Para ello contamos con un conjunto de actividades y un grupo fenomenal de voluntarios.