Santo Rosario en audio para cada día
El Rosario es un “foco de amor” –explicaba san Josemaría– pues tiene el “Padre nuestro que ha salido de la boca de Jesús; el Ave María, que tiene aroma de ángel; y todas esas manifestaciones de glorificación al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo; y después los piropos [las letanías]”.
Meditaciones: 24 de diciembre
Reflexión para meditar el 24 de diciembre. Los temas propuestos son: dar gracias por la llegada de Jesús; se ha manifestado la gracia de Dios; termina la espera.
Meditaciones: 23 de diciembre
Reflexión para meditar el 23 de diciembre. Los temas propuestos son: la misión de Juan; ocultarse y desaparecer; el modo silencioso del obrar de Dios.
Meditaciones: 22 de diciembre
Reflexión para meditar el 22 de diciembre. Los temas propuestos son: el agradecimiento de María; nuestro deseo de Dios es socorrido por Él; de la gratitud a la generosidad.
Meditaciones: 21 de diciembre
Reflexión para meditar el 21 de diciembre. Los temas propuestos son: María parte deprisa a la montaña; gratitud por la bondad de Dios; la alegría del que cree.
Meditaciones: viernes de la 3.ª semana de Adviento
Reflexión para meditar el viernes de la tercera semana de Adviento. Los temas propuestos son: la paz es un don de Dios; el designio de salvación es universal; el Bautista quiere que solo brille Jesús.
Meditaciones: 20 de diciembre
Reflexión para meditar el 20 de diciembre. Los temas propuestos son: la alegría de toda vocación; hallar gracia delante de Dios; dejar que el Señor haga su obra en nosotros.
Meditaciones: 19 de diciembre
Reflexión para meditar el 19 de diciembre. Los temas propuestos son: confianza y temor de Zacarías; las lecciones del silencio; fiarse de Dios.
Meditaciones: jueves de la 3.ª semana de Adviento
Reflexión para meditar el jueves de la tercera semana de Adviento. Los temas propuestos son: Dios es fiel a sus promesas; el ejemplo de san Juan Bautista; la fidelidad siempre es creativa.
El silencio de un alma contemplativa: El tiempo de la tarde y de la noche
La costumbre del tiempo de trabajo de la tarde y del tiempo de la noche nos puede ayudar a recoger los sentidos para entablar un diálogo sin ruido de palabras con el Señor.