“Quiero dar algo de tiempo y amor a la próxima generación”, afirma Helena Machin, que también trabaja con clientes de alto perfil como directora creativa para una sombrerería francesa. A través de sus Style Masterclasses (clases magistrales de moda), Helena transmite cómo vestir bien, en todo el sentido de la palabra.
“Quiero que abracen su feminidad vistiéndose de manera atractiva y modesta, y que al hacerlo cumplan con el potencial que Dios les ha dado”, afirma Machin en esta entrevista en el marco de una de sus conferencias.
Helena ideó estas clases magistrales después de que James, su hermano gemelo, falleciera hace tres años a causa de una enfermedad terminal.
“Pasó su vida sirviendo a otros, mostrándoles el camino hacia Cristo a través de su ejemplo heroico, y a pesar de estar enfermo la mayor parte del tiempo”, recordó. “A través de su buen humor y ejemplo, logró que muchas personas regresaran a la fe”.
Más o menos al mismo tiempo, ella descubrió el Opus Dei y su énfasis en la dimensión espiritual del trabajo y de la vida ordinaria. Inspirada por las enseñanzas de San Josemaría Escrivá de Balaguer, el fundador de la organización, Helena se decidió a santificar su trabajo en la industria de la moda.
Una estudiante de crítica de arte, Amy Mulevnna, de 23 años, afirma que Machin enseña a las mujeres a reflejar su verdadera personalidad y feminidad, un cambio bienvenido ante el enfoque que algunas revistas promueven: que te presentes sin respeto.
Emily Green, de 19 años y estudiante de negocios en King’s College, Londres, dijo que la Style Masterclass “redefine el papel y la distinción entre hombres y mujeres”.
“Las mujeres deben volverse muy ‘masculinas’ para encajar en los lugares de trabajo”, apunto Green. “Esto confunde a los hombres y reafirma su posición de manera violenta, pero las mujeres ni esperan ni desean eso”.
"If you want to be treated like a lady, dress like a lady (“Si quieres que te traten como una dama, vístete como una dama”)".
“Me encanta el enfoque que tiene Helena hacia el diseño”, dijo Green. “Tiene una terminología perfecta; te das cuenta de que sabe de qué está hablando y que está en la cúspide, y esto simplemente cautiva a la audiencia. Ella cree que el vestido es un lenguaje, y es muy cierto”.
“Todos queremos reconocimiento social y a veces las niñas podrían vestirse para no desentonar, pero no se dan cuenta de que sólo consiguen menos respeto. Si tú no te respetas, los otros no te pueden respetar”.
Vicky Weissmann, estudiante de medicina, afirma que considera “de buena educación y una cortesía hacia los demás el vestirse bien”. Según Machin, este mensaje de decoro funciona en las dos direcciones.
Al concluir la sesión, la diseñadora ofreció un consejo a todas las mujeres jóvenes: If you want to be treated like a lady, dress like a lady (“Si quieres que te traten como una dama, vístete como una dama”).