Combate, cercanía, misión (4). «No entristezcáis al Espíritu Santo»: La tibieza
La tibieza es una enfermedad del corazón, por la que las cosas de Dios nos disgustan, y por la que llegamos incluso a convencernos de que la vida, la verdadera vida, está en otra parte.
Algo grande y que sea amor (XI): Caminar con Cristo hacia la plenitud del Amor
«El camino se resume en una única palabra: amar, (...) tener el corazón grande, sentir las preocupaciones de los que nos rodean, saber perdonar y comprender: sacrificarse, con Jesucristo, por las almas todas» (San Josemaría).
Para mí, vivir es Cristo (V): la gratitud nos mueve a la lucha
¿Cuáles son los verdaderos motivos que mueven a un cristiano? ¿Qué buscamos cuando decimos que queremos ser mejores? La lucha se debe centrar en Dios, no en nosotros, sugiere este texto.
Para mí, vivir es Cristo (VIII): agradar a Dios. Santidad y perfeccionismo
La llamada del Señor a «ser perfectos como el Padre celestial» (Mt 5,48) consiste en vivir como hijos de Dios, conscientes del valor que tenemos a sus ojos, anclados en la esperanza y en la alegría que nace de sentirnos hijos de tan buen Padre.
La ternura de Dios (II): “Anda y haz tú lo mismo”: la Ley de Dios y la misericordia
¿Quién es mi prójimo? El Señor responde a esta pregunta de un doctor de la Ley con la parábola del buen samaritano. Abre así ante él, y ante nosotros, el horizonte de las bienaventuranzas, que muestran la profundidad de la Ley de Dios. Nuevo editorial sobre la misericordia.
Formación de la personalidad (II): protagonistas de nuestra vida
Cuando explicamos el por qué de nuestras reacciones espontáneas, más que decir "es que soy así", muchas veces tendríamos que admitir: "me he hecho así". Editorial sobre la forja del carácter en la vida del cristiano.