
Sin coche y sin bateria
Tengo devoción a Toni desde que en agosto de 2008 conocí su historia en un viaje a Suiza y me hizo varios favores. El año de la pandemia no fue la excepción.
Evangelio del día y comentario: reflexión diaria sobre el evangelio del día para orar con la Palabra de Dios.
Tengo devoción a Toni desde que en agosto de 2008 conocí su historia en un viaje a Suiza y me hizo varios favores. El año de la pandemia no fue la excepción.
Toni nos ayudó a recordar un modo casero de solucionar los dolores de mi esposa sin tener que salir a un hospital en medio de la cuarentena por el Covid-19.
No conseguía pasar los contactos y apuntes de un teléfono estropeado a uno nuevo... y pidió ayuda a un ingeniero: Toni Zweifel.
El viernes 14 de diciembre de 2018 sufrí un corte de corriente en mi oficina. Todo el equipo eléctrico volvió a funcionar correctamente, excepto mi ordenador y el segundo monitor de este último.
Permanecí en el hospital una semana entera y tuve que hacer frente a un tratamiento de tres meses.
Había enviado un artículo que no fue aceptado por razones diversas.
Era conveniente que cambiara de trabajo porque la situación se había hecho insostenible.
Tenía problemas laborales y de estudio y un amigo me recomendó que rezara a Toni Zweifel.
Una tarea que se complica, un bloqueo, una oración de la estampa de Toni.
Siempre que tenemos algún problema técnico acudimos a Toni y siempre nos resuelve todo.
El presupuesto de la empresa para nuevos proyectos se había agotado y me veía en la calle.
Pensé: «Está bien, vamos a pedirle a este ingeniero que me arregle el 'pollo'». El 'pollo' es el nombre familiar que usamos en casa para llamar a mi nuevo coche amarillo de segunda mano, que tenía varios problemas que dificultaban obtener un seguro nuevo y superar la ITV.