Opus Dei

El remedio —costoso como todo lo que vale— está en buscar el verdadero centro de la vida humana, lo que puede dar una jerarquía, un orden y un sentido a todo.

¡Es una cosa de primera importancia el trabajo en el hogar! Por lo demás, todos los trabajos pueden tener la misma calidad sobrenatural: no hay tareas grandes o pequeñas; todas son grandes, si se hacen por amor. Las que se tienen como tareas grandes se empequeñecen, cuando se pierde el sentido cristiano de la vida. Conversaciones, 109.

En 1988, durante un viaje pastoral a Canadá, Mons. del Portillo explicó por qué debemos amar a nuestros padres.

Procurad que los niños aprendan a valorar sus actos delante de Dios. Dadles motivos sobrenaturales para que discurran, para que se sientan responsables; y no les mostréis desconfianza.

Comunicación presentada por Montserrat Gas Aixendri en el Congreso con motivo del Centenario de Álvaro del Portillo, en la Pontificia Universidad de la Santa Cruz (12-14 de marzo de 2014).

Comunicación presentada por María Jesús Coma del Corral y Adelaida Sagarra Gamazo en el Congreso con motivo del Centenario de Álvaro del Portillo, en la Pontificia Universidad de la Santa Cruz (12-14 de marzo de 2014).

Rosedale, dentro del programa de la South Bronx Educational Foundation, promueve la mejora académica y personal de las jóvenes y niñas en el Bronx. Luchan contra las consecuencias de los hogares rotos, de la droga y de la violencia.

Mi nombre es Juan Manuel Florido, tengo 39 años, soy profesor de educación física en un Colegio de Sevilla y mi afición es correr maratones. Hasta aquí no hay nada especial, pero si le añadimos que estoy casado y tengo 5 hijos, esperando el sexto, seguramente cambia un poco la cosa. Y si encima considero esta afición como un medio que me puede ayudar a acercarme a Dios, todavía cambia más.

Carta del padre de uno de los sacerdotes ordenados recientemente, que ha publicado un periódico español. "Nuestro hijo nos estaba acercando a Dios y unía a la familia".

“Educar a la mujer es educar a una familia”. Ese es el lema de CEFIM, Centro de Formación Integral para la Mujer, que se creó en la capital boliviana en 1986. A las mujeres de escasos recursos, CEFIM ofrece una formación integral, que les capacita en un oficio y, respetando su identidad cultural, les permite mejorar sus condiciones de vida.