La pasión de Montse Grases por el deporte y por la vida
A Montse le gustaba cantar, nadar, ir en bicicleta, jugar al tenis, al ping-pong... Mª Luisa Xiol, una de sus mejores amigas, recuerda los veranos en Seva, un pequeño pueblo al norte de la Sierra de Montseny: “Nunca estábamos sin hacer nada. Cuando no íbamos de excursión, nos quedábamos en casa y jugábamos a las cartas, o leíamos. La recuerda así: “con una gran pasión por el deporte, y una gran pasión por la vida”.
El Gordo de Navidad
El 22 de diciembre de 1957 se televisó por vez primera el Sorteo Extraordinario de Navidad en España, aunque la mayoría lo siguieron por la radio porque todavía muy poca gente disponía de ese aparato en casa.
Un cartel en el cine
Empecé a encontrarme mal de salud por unos hormigueos que sentía en manos y pies. Durante meses fui de médico en médico y me hice pruebas pero no daban con la causa. Estaba muy asustada por si era una enfermedad grave.
Un favor de Montse con detalle incluido
Se me acababa el tiempo para solucionar un problema, y Montse tuvo un detalle en su santo,
Nos devolvió a nuestra hija
Mi familia le debe mucho a Montse Grases. Somos un matrimonio con tres hijas maravillosas, pero la segunda, que hoy tiene 20 años y es una niña de muy buen fondo, hizo hace un par de años un nuevo grupo de amigos en vacaciones de verano, entre los cuales estaba un chico del que se enamoró perdidamente… y que ningún padre querría para su hija.
"Oración: ni pizca de ganas"
Las anotaciones de Montse Grases, durante los últimos meses de su vida, muestran cómo luchaba diariamente por mejorar.
Se abrió al primer intento
Trabajo en una agencia de viajes. Un día, al llegar a la oficina, me comunican que la caja fuerte, donde se guardan los billetes, no se puede abrir.
Respiraba con un jadeo continuo
El segundo de mis hijos nació a los siete meses de gestación y sólo pesaba dos kilos y medio. A las pocas horas de nacer le fue diagnosticada una hemorragia cerebral que le provocó un cuadro de insuficiencia respiratoria muy grave.
Hace una vida normal
Mi hija, de 9 años, tenía la enfermedad de Werhloff: destrucción de las plaquetas de la sangre, que le habían quedado reducidas a 80.000 por mm3, siendo así que lo normal es de un valor medio de 250.000.