El Foro Bidasoa de Irún organizó esta conferencia que se celebró en el Centro Cultural Amaia. La profesora Echaide dijo que "el trabajo, en la enseñanza del beato Josemaría, no está contemplado únicamente como un medio ascético más en el que se pueden desarrollar las virtudes cristianas sino como la colaboración del hombre en la obra creadora de Dios, idea que ha sido recogida después en la doctrina de la Iglesia a partir del Concilio Vaticano II".

En su intervención, pidió ir más allá de la búsqueda de la perfección humana: "Al hablar de realizar bien el trabajo, no nos quedemos sólo con la idea del profesional competente, puntual, que realiza un trabajo intenso, tal como se le ha encomendado. Eso es mucho... y es poco. Pensemos también en quienes ponen su inteligencia y su ingenio al servicio de la mejora de las técnicas, de los materiales, en la solución audaz e ingeniosa de los problemas que van surgiendo en la convivencia entre los hombres". Con esto hizo referencia a toda labor "que tiene como resultado el progreso de la sociedad en que se vive. En realidad, todos debemos poner ese 'algo' nuestro en el trabajo -aun en las tareas más sencillas- que al mismo tiempo es ocasión de desarrollar la propia personalidad".

Al hablar de los rasgos del quehacer universitario, Ana Echaide pidió: "Humildad intelectual, compromiso con la verdad y libertad". Además señaló otra nota esencial en la que también insistía el beato Josemaría: el sentido apostólico del trabajo.