El libro más conocido de san Josemaría Escrivá de Balaguer, Camino, ha alcanzado los 5 millones de ejemplares en numerosos idiomas y es el cuarto libro escrito en castellano más traducido a otros idiomas, después de El Quijote y dos obras del Premio Nobel Gabriel García-Márquez.
Con ocasión de la edición nº 100 en castellano de Camino, de la Editorial Rialp, el profesor D. Enrique García-Máiquez glosó algunos puntos del libro alrededor de una idea muy presente entre los intelectuales de la época en la que san Josemaría compuso el libro: la nobleza de espíritu, entendida como una alta aspiración a ser y dar lo mejor de uno mismo a Dios y a los demás, a ser magnánimos, a tener grandeza de alma, a aspirar a altos ideales, sin arredrarse ante las dificultades, sin escatimar el esfuerzo, con valentía ante los obstáculos, sin temor al qué dirán.
La defensa de la nobleza de espíritu en Camino
En palabras de Enrique García-Máiquez, “un aspecto especialmente bonito del pensamiento de san Josemaría, reflejado en Camino, es la defensa de la nobleza de espíritu presente entre algunos intelectuales contemporáneos a la redacción del libro, como Eugenio D’Ors, José Ortega y Gasset, Ernest Jünger, Simone Weil y Juan Ramón Jiménez, autores que san Josemaría, siempre muy interesado por la cultura y la universidad debió leer y conocer. Y continuaba el Prof. García-Máiquez: “esa nobleza de espíritu de la que hablaron estos intelectuales en el primer tercio del siglo XX y de la que escribió el autor de Camino en los años treinta del siglo pasado, es un mensaje enormemente actual para la preparación de los años treinta de este siglo XXI”.

El acto fue presentado por el presidente del Patronato del Colegio Mayor Almonte, D. José María Ruiz Antón, que explicó a las familias asistentes las funciones del Patronato, que gestiona el Colegio Mayor en todos los aspectos que corresponden a un Consejo de Administración, para que Almonte cumpla su misión de ayuda a los estudiantes residentes y a los colegiales adscritos en los distintos aspectos de su formación.
A continuación, el director del colegio mayor, D. Luis Melgarejo, impuso las becas colegiales a los colegiales residentes y adscritos acreedores de tal distinción, y el secretario ejecutivo, D. José Antonio Fernández, hizo entrega de los diplomas a los residentes egresados, comentando la excelencia de los que habían cursado los distintos cursos y actividades del colegio mayor y el programa Highlight.
El decano, D. Juan Redrejo, recordó con gracia y buen humor algunos de los momentos mejores del curso, las actividades más sobresalientes y aprovechó para agradecer la dedicación y el interés en su formación de los directivos y profesores asesores, los cuidados de la Administración que contribuyen de manera decisiva a sentir y vivir el colegio mayor como una familia; y a los padres por el esfuerzo y la confianza en el Mayor. También alentó a los residentes mayores a contribuir en los fines del colegio, ayudando a los más jóvenes.
Tras las palabras del decano, tuvo lugar la imposición de becas de honor a los profesores y colaboradores D. Jose María González-Alorda Iriarte, Dña. Paloma Ruiz-Mateos Rivero, D. Álvaro de Cristóbal Carazo, D. Alberto Portilla Ciriquiain, al matrimonio Dña. María Santiago Quesada y D. José Luis Redrejo Rodríguez y a D. Fernando Betancourt Serna, que agradeció la confianza depositada en ellos.
Finalmente, el director, D. Luis Melgarejo, dirigió unas palabras a los alumnos, animándoles a darse a los demás y a empeñar sus mejores esfuerzos en adquirir una buena formación profesional, humana y espiritual para servir mejor a la sociedad. El acto se cerró con el canto del tradicional himno universitario Gaudeamus Igitur.
Un encuentro entrañable y enmarcado dentro del tradicional ambiente de familia que impregnan las actividades del colegio mayor.
