Una parroquia dedicada a San Josemaría en Medellín

Desde hace cinco años por iniciativa del Arzobispo de Medellín se fundó esta parroquia en un sector popular de la capital de Antioquia. Los papás y las alumnas del Gimnasio los Pinares vienen ayudando para conseguir los recursos de la nueva sede.

Entrada de la Parroquia.

Hasta mayo de 2002 el populoso sector de Belén-Aguas Frías, una de las zonas marginales de la ciudad, no contaba con una parroquia propia, y dependía de la  de Nuestra Señora de la Anunciación del sector Belén-Las Violetas.

Ante las necesidades de atención espiritual de las familias de esa zona, el Padre Omar Quintero, de la parroquia de la Anunciacíon, solicitó al Arzobispo de Medellín la creación de una nueva parroquia, y propuso que se dedicara a San Josemaría Escrivá, quien sería canonizado en octubre de ese mismo año. 

La iniciativa fue acogida por el Sr. Arzobispo, y el 2 de junio de 2004 inició sus actividades esta nueva parroquia, con todo lo que supone de trabajo y esfuerzos, máxime teniendo en cuenta las condiciones de pobreza de la zona. Se instaló provisionalmente en un salón que funcionaba como asilo parroquial, y allí se tienen actualmente las celebraciones litúrgicas, reuniones de fieles, etc. Trabajo conjunto 

En 2008, el párroco actual, P. Rafael Alberto Gómez Hincapié, se puso en contacto con los padres de familia del Gimnasio Los Pinares, Obra corporativa del Opus Dei en Medellín, con el objeto de solicitar apoyo para la parroquia. La caridad no es algo abstracto (...). La caridad exige que se viva la justicia, la solidaridad, la responsabilidad familiar y social...  (Cfr. Conversaciones, n. 62) Así se expresaba San Josemaría en 1968, y con este espíritu y la orientación de algunas directivas del colegio, un comité de padres de familia se pusieron manos a la obra, para colaborar con la parroquia, tanto en sus necesidades materiales como en la formación y ayuda a las personas del sector. 

Durante la reunión del grupo promotor.

Como necesidad primordial estaba la construcción de la sede definitiva de la parroquia. Varios papás del colegio, ingenieros y arquitectos de profesión, hicieron una visita al terreno de la futura construcción. Estudiaron con el párroco las necesidades que debían tenerse en cuenta y empezaron a trabajar en los planos. 

Para esto era necesario el dinero, así que se conformó un comité financiero que buscará ayudas económicas para el proyecto. Además, un grupo de mamás de Los Pinares planearon una serie de actividades para recoger fondos. Entre octubre de 2008 y mayo de 2009, entre otras actividades, se ha organizado un bazar de comidas, y se conformó un costurero que hace uniformes y destina el producto de las ventas a esta labor.Con la comunidad 

Simultáneamente se empezaron actividades de promoción y formación de las familias de la zona, ofreciendo charlas de formación espiritual y capacitación material.  

Entrada al predio de la Parroquia.

Mamás del colegio se desplazan hasta el sector para dictar los cursos a las señoras del barrio, a quienes las clases les han permitido recabar algunos ingresos extras para la familia, aprendiendo a elaborar manualidades; mejorar las condiciones alimenticias, con una dieta balanceada o iniciar un pequeño negocio de comidas.  

También, con la colaboración de las alumnas del colegio, se recopiló material escolar que se llevó al barrio para ofrecerlo a muy bajo costo y facilitar a los niños acudir a la escuela con un mínimo de útiles. Y en varias ocasiones han hecho ventas de ropa, recaudando fondos para las necesidades actuales de la parroquia. Fiestas patronales 

Entre los habitantes de la zona, San Josemaría es más que un santo, es “nuestro patrono”. Así, cada año se procura celebrar con gran solemnidad la fiesta del 26 de junio. 

Clases de Formación.

Este año se celebraron las Fiestas patronales entre el 18 y el 29 de junio. A diario se tuvo la Exposición y bendición con el Santísimo, celebraciones eucarísticas en distintos sectores del barrio y el rezo de la Novena a San Josemaría. El domingo 28 se tuvo una procesión en honor al Santo, con la participación de todos los fieles de la parroquia y la banda escolar.  

No podía faltar una jornada dedicada a los benefactores –actuales y futuros- confiados en que San Josemaría procurará que se les retribuya con creces su generosa colaboración en servicio de Dios y de su Iglesia.

Altar de las Fiestas Patronales.

Por: Laura Solórzano de Bedoya. Especial/ Trazos