Prelado del Opus Dei, a los nuevos diáconos: “Explicad la fe de modo positivo”

Mons. Javier Echevarría ha conferido la ordenación diaconal a seis fieles del Opus Dei en Roma. “Explicad –ha aconsejado a los diáconos– las grandes verdades de nuestra fe de modo positivo, especialmente las que se refieren a la salvación eterna del alma”.

Link a la homilía completa del Prelado (Roma, 27 de febrero de 2016)

Seis fieles del Opus Dei han recibido hoy el diaconado de manos del Prelado, Mons. Javier Echevarría, en una ceremonia celebrada en la parroquia de san Josemaría (Roma). Los nuevos diáconos son Alejandro Jesús Arenas (Perú), Eduardo Ares (España), Miguel Ángel Correas (España), Pablo López (España), Carlos Rodríguez (España) e Irineo Pallares (México).

Tras haber trabajado en diferentes profesiones, han realizado los estudios y la formación necesaria para recibir las sagradas órdenes. Su ordenación presbiteral está prevista para el próximo 4 de septiembre en el Santuario de Torreciudad (España).

En su homilía, el Prelado del Opus Dei se ha dirigido a los diáconos con estas palabras: “Desde hoy, nuestra Madre [la Iglesia] os confía el poder de predicar con autoridad la Palabra de Dios, de distribuir el Cuerpo de Cristo en la Comunión, de ejercitaros en las obras de caridad en nombre del Señor mismo”.

“En la predicación, hijos míos –ha continuado– explicad las grandes verdades de nuestra fe de modo positivo, especialmente las que se refieren a la salvación eterna del alma. Es éste un servicio de gran importancia en el mundo actual”.

Asimismo, ha recordado que “la liturgia de hoy nos enseña que en la bondad de Dios, la misericordia y la justicia se entrelazan. El mensaje es claro: aprovechemos el tiempo de la misericordia, para prepararnos cada día a nuestro futuro encuentro cara a cara con el amor de Dios”.

En concreto, el Prelado ha sugerido reflexionar sobre “cómo estamos viviendo la preparación de la Pascua, en este Año de la misericordia”, pidiendo a Dios “la gracia de saber confesar nuestros pecados para obtener su perdón”.

“El reconocimiento de nuestras culpas –ha señalado– es la llave para abrir las puertas de la divina clemencia (...). La mano de Dios, paterna y materna, está siempre dispuesta a cancelar nuestras culpas si nos acercamos a la confesión”.

Finalmente, ha invitado a que “nos acerquemos más al Señor, en las restantes semanas de la Cuaresma. Una confesión más profunda, con mayor dolor por los pecados, puede ser el impulso que necesitamos para producir muchos frutos, sea en nuestra vida personal, sea en el trabajo apostólico, siempre con alegría cristiana”.

Al sacerdocio, tras años de trabajo profesional

Los nuevos diáconos han realizado estudios civiles y trabajado en diversas ocupaciones antes de emprender su vocación sacerdotal. Por ejemplo, Alejandro Jesús estudió Ingeniería Mecánica en la Universidad Nacional de Ingeniería, en Lima (Perú). Durante 10 años, antes de iniciar su preparación en Teología, trabajó como comercial de productos hidráulicos.

Irineo Pallares, procedente de Culiacán (México) estudió Administración financiera. Durante 13 años trabajó en un hotel de cinco estrellas, donde realizó numerosas tareas, desde maletero y recepcionista al inicio, hasta finalizar como gerente de ingresos y costos. Asimismo ha sido gerente de un negocio de ropa y jefe de formación en el Instituto Chapultepec.

Eduardo Ares estudió Filología Clásica en la Universidad Complutense de Madrid (España). Ha sido profesor en numerosos colegios e institutos. Es además narrador oral escénico, una pasión por la que ha recibido premios internacionales.

Miguel Ángel Correas, original de Alcázar de San Juan (España), estudió Ingeniería Técnica Informática en la Universidad de Castilla la Mancha. Durante más de diez años fue profesor en la Escuela Familiar Agraria Moratalaz (Ciudad Real, España).

Carles Rodríguez Raventós, estudió Electrónica industrial en el Collegi Xaloc (L'Hospitalet de Llobregat) y Arquitectura Técnica, especializado en coordinación de seguridad en la construcción. Trabajó para la multinacional suiza SGS (Société Générale de Surveillance) como coordinador de seguridad durante casi 10 años.

Pablo López González es licenciado en Psicopedagogía. Maestro en la especialidad de Educación Física, ha trabajado en el Colegio Andel (Madrid) hasta 2010, año en que inició sus estudios eclesiásticos.