“Me enseñan a ser mejor persona, a llevar adelante un grupo, como líder"

En el tranquilo entorno rural de Jáuregui, Provincia de Buenos Aires, se encuentra Los Aromos, una escuela secundaria orientada en ciencias naturales que busca inspirar a sus estudiantes a alcanzar grandes metas y dejar una huella positiva en su entorno y en el país.

“Yo digo que soñéis cosas buenas, cosas grandes. Que penséis con el corazón y con la cabeza porque con el corazón también se piensa, en grandes novelas de cariño y de bien”, decía san Josemaría, hace 50 años, en Argentina. Inspirados por este mensaje, es que la Fundación Marzano crea Los Aromos en el año 2018 como parte de un esfuerzo por promover el desarrollo rural argentino. 

Para Luisina, una de las alumnas de la escuela, el objetivo va más allá de la educación: "A largo plazo sueño con generar un impacto en el mundo y tener una familia que pueda disfrutar de ese impacto". Estas palabras de Luisina reflejan el espíritu que impregna a Los Aromos y la impronta que deja la Fundación en cada uno de sus proyectos educativos.

"A largo plazo sueño con generar un impacto en el mundo y tener una familia que pueda disfrutar de ese impacto".

"Aquí no solo nos instruimos educativamente, sino que aprendemos a tener una mejor formación como personas", comparte una de las estudiantes. Otra agrega: "Me enseñan a ser mejor persona, a llevar adelante un grupo, como líder".

Esta visión de desarrollo integral encuentra su inspiración en el mensaje de san Josemaría que ha guiado a la Fundación Marzano desde su fundación en 1974. Con el objetivo de favorecer el desarrollo y la promoción del medio rural, la fundación ha puesto en marcha diversos proyectos e iniciativas educativas a lo largo de los años.

En la actualidad, la Fundación Marzano gestiona nueve establecimientos educativos de nivel secundario distribuidos en tres provincias argentinas: Santa Fe, Buenos Aires y Mendoza. Cada uno de estos centros representa un faro de esperanza y oportunidad para las comunidades rurales, brindando educación de calidad y fomentando el crecimiento personal y profesional de sus estudiantes.

Para la Fundación Marzano, el compromiso es claro: sembrar sueños y cultivar líderes que transformen el mundo desde el corazón del campo argentino.