Número de artículos: 41

​Formación de la personalidad (III): el recto amor de sí mismo

Nuevo texto de la serie centrada en la formación de la personalidad. En esta ocasión, se reflexiona sobre el conocimiento de uno mismo, con virtudes y defectos, necesario para ser feliz.

Textos espirituales

​Formación de la personalidad (II): protagonistas de nuestra vida

Cuando explicamos el por qué de nuestras reacciones espontáneas, más que decir "es que soy así", muchas veces tendríamos que admitir: "me he hecho así". Editorial sobre la forja del carácter en la vida del cristiano.

Textos espirituales

Las virtudes, regalos de Dios

Necesitamos más fe, más esperanza, más caridad, asegura Mons. Álvaro del Portillo.

Documentación

​Formación de la personalidad (I): Una personalidad que se identifique con Cristo

Comenzamos una serie de editoriales sobre la formación del carácter y la madurez cristiana. ¿Cómo influye la personalidad en la vida diaria? ¿puede cambiar una persona? ¿qué papel desarrolla la gracia?

Textos espirituales

El milagro de la fe

Dios quiere operar milagros constantes —resucitar muertos, dar oído a los sordos, vista a los ciegos, posibilidades de andar a los cojos...—, a través de tu actuación profesional santificada, convertida en holocausto grato a Dios y útil a las almas.

Rezar con san Josemaría

Paul, Estados Unidos

Paul vive en Sherborn,Massachusetts. Estudia composición musical y tiene 20 años: "Espero que mi futuro trabajo como compositor me permita dar alegría a otras personas"

Testimonios

La humildad

Jesucristo, Señor Nuestro, con mucha frecuencia nos propone en su predicación el ejemplo de su humildad: aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón. Para que tú y yo sepamos que no hay otro camino.

Rezar con san Josemaría

Generosidad

Cuanto más generoso seas, por Dios, serás más feliz. ¡Qué gustoso resulta el sacrificio gaudium cum pace, alegría y paz, si la renuncia es completa!

Rezar con san Josemaría

La esperanza

A mí, y deseo que a vosotros os ocurra lo mismo, la seguridad de sentirme —de saberme— hijo de Dios me llena de verdadera esperanza. Estoy feliz con la certeza del Cielo que alcanzaremos, si permanecemos fieles hasta el final.

Rezar con san Josemaría

Estoy roto, pero sigo sirviendo

Las cosas más propias de la vida ordinaria sirven para hacer oración. Una sopera rota, por ejemplo. San Josemaría decía que él era así, como una sopera rota -por los pecados- y arreglada -gracias a la confesión- que seguía sirviendo buen alimento a los demás (01’58’’).

Rezar con san Josemaría