«El mundo necesita de gente joven y esperanzada»
Elena es estudiante de Farmacia, y en pocos días viajará con su colegio mayor a Lisboa para participar en la JMJ.
«Recogí el testigo de muchas mujeres valientes»
La enfermera vallisoletana Machús Otero comparte las experiencias y los retos que afrontan en África del Este, cuando se cumplen 63 años de la llegada de las primeras mujeres de la Obra a Nairobi.
Un mundo de paellas y amigos
La paella es el plato más tradicional y universal de la Comunidad Valenciana. Rafa aprendió a cocinarla y ahora es una afición alrededor de la que reúne a muchas personas, tanto para un proyecto solidario como para pasar un buen rato y hablar de lo humano y lo divino.
«Mi fe no podía depender de si mis hijos se salvaban o no»
Luis y Almudena están casados y viven en Pamplona. En una revisión rutinaria, la ginecóloga detectó una anomalía. A la semana siguiente repitió la ecografía y se le cambió la cara: tenían que marcharse a Barcelona inmediatamente. Así comienza una historia de incertidumbres, amistades y mucha fe en Dios.
«La formación que recibo en la Obra es fundamental para mi vida»
Juan Eusebio trabaja en el campo de Mérida en tareas agrícolas y acoge, con su mujer, a niños saharauis que proceden de campos de refugiados.
Pau, un disfrutón de la vida
Pau es músico y pintor. A través de estas dos artes vive una relación muy personal con Dios. En este vídeo (con subtítulos en castellano) explica cómo convierte cada una de las cosas que hace en oración: pintar un graffiti, un concierto con amigos.... Y siempre disfruta, dice, "como un enano".
Cuando no haya nadie más, conviértete tú en un referente.
Kaleb Rivera, originario de Chihuahua, dice que jamás pensó estar en donde se encuentra hoy en día si no fuera por los planes de Dios y su manera de actuar. Con tan solo 28 años y una carrera en economía, actualmente se encuentra casado, además de que por su condición se ha convertido en el ejemplo para muchos conocidos y con otros no tanto que comparten su padecimiento.
«El lama me dijo que tenía que ir a Misa todos los días»
Raquel Escudier es de San Fernando (Cádiz), está casada y es madre de dos hijos. Su vida dio un giro radical el día que un lama, un maestro espiritual del budismo, le dijo que tenía que ir a Misa todos los días.
«Quiero ser una mejor persona, para esa persona que va a venir en mi futuro».
Loreta es una chica que va contracorriente. Las redes sociales fueron una disyuntiva para actuar diferente a lo que piensan los demás en búsqueda de su felicidad. También habla de la importancia de la pureza en el noviazgo y que es difícil —pero no imposible— de vivir.
Una vida extraordinaria, lograda y feliz
“Me llamo Manolo, tengo una parálisis cerebral de nacimiento, era el mayor de tres hermanos y tenía que dar ejemplo, tenía que ser normal no, lo siguiente…”. Así comienza la historia de un luchador.