Trabajar con amor
"Si miramos nuestra vida con humildad, distinguiremos claramente que el Señor nos ha concedido, además de la gracia de la fe, talentos, cualidades. Ninguno de nosotros es un ejemplar repetido: Nuestro Padre nos ha creado uno a uno, repartiendo entre sus hijos un número diverso de bienes. Hemos de poner esos talentos, esas cualidades, al servicio de todos: utilizar esos dones de Dios como instrumentos para ayudar a descubrir a Cristo".
El trabajo y la gente del Opus Dei
La vocación al Opus Dei no cambia ni modifica en ningún modo la condición, el estado de vida, de quien la recibe. Y como la condición humana es el trabajo, la vocación sobrenatural a la santidad y al apostolado.
Trabajar bien, trabajar por amor (XII): Santificación del trabajo y cristianización de la sociedad
Este editorial sobre el trabajo desarrolla el mensaje principal de san Josemaría: que la propia tarea bien hecha y ofrecida al Señor es medio para acercarse a Dios y cristianizar la sociedad.
Conciliar familia y trabajo
El remedio —costoso como todo lo que vale— está en buscar el verdadero centro de la vida humana, lo que puede dar una jerarquía, un orden y un sentido a todo.
Cristo en la cumbre de las actividades humanas
A esto hemos sido llamados los cristianos, ésa es nuestra tarea apostólica y el afán que nos debe comer el alma: lograr que sea realidad el reino de Cristo, que no haya más odios ni más crueldades, que extendamos en la tierra el bálsamo fuerte y pacífico del amor.
Trabajar bien, trabajar por amor (XI): Unidad de vida en la profesión
Para poder ofrecer el propio trabajo a Dios, hay que realizarlo bien: con buena intención, con criterio recto y una conducta exterior que manifieste esos deseos interiores. Nuevo editorial sobre el trabajo.
Ser contemplativos en medio del mundo
Persuadíos de que no resulta difícil convertir el trabajo en un diálogo de oración. Nada más ofrecérselo y poner manos a la obra, Dios ya escucha, ya alienta.
Santificación del trabajo
Amamos ese trabajo humano que El abrazó como condición de vida, cultivó y santificó. Vemos en el trabajo un signo del amor de Dios a sus criaturas y del amor de los hombres entre sí y a Dios: un medio de perfección, un camino de santidad.
Iroto, un centro de desarrollo para la mujer en Nigeria
El desarrollo humano y social depende en gran parte de la educación. Compaginar el trabajo, que muchas mujeres africanas deben realizar para mantener la familia, y la formación es el sistema elegido por Iroto para fomentar el desarrollo y la esperanza.
Kimlea, una esperanza para la mujer del medio rural en Kenia
Nganga tiene tres años y está desnutrido. Pedimos a una donante italiana que se encargara de sus gastos de alimentación, incluyendo dos vasos de leche diarios...