Amistad y Solidaridad: Encuentro Nacional 2020

Más de setenta universitarias y jóvenes profesionales de todo el país se inscribieron y participaron en un fin de semana de reflexión y crecimiento personal entorno a la amistad y la solidaridad.

Por Aurora Pachano

La pandemia de coronavirus no nos podía dejar sin el encuentro nacional de universitarias que llevamos a cabo todos los años en las vacaciones de mitad de año, así que optamos por hacerlo #desdeCasa. La respuesta fue súper positiva.

De hecho, en la organización y planeación del evento nos fue mucho mejor, porque gracias a los retos que nos impone el confinamiento preventivo, logramos articular a través de los medios digitales un mejor trabajo en equipo en el que conjugamos la visión y experiencia que hemos adquirido desde distintas ciudades y Casas de la Obra en Colombia donde realizamos actividades de formación para adolescentes y universitarias; a estas actividades las llamaba San Josemaria “labor de San Rafael”.

Bajo el título “Amistad y Solidaridad” diseñamos el encuentro nacional que se llevó a cabo entre el 3 y el 5 de julio, desde casa. Nos inspiramos en la carta pastoral del Prelado de la Obra, Mons. Fernando Ocáriz, sobre la amistad (Carta, 1-XI-2019) y nos apoyamos en el libro “El Principito” para trabajar ambas virtudes. Este último, al ser un texto tan ampliamente conocido y con tanta buena acogida, ayudó a despertar el interés de las chicas que no conocen o conocen muy poco el Opus Dei. Más de setenta universitarias y jóvenes profesionales de todo el país se inscribieron y participaron en un fin de semana de reflexión y crecimiento personal. Cabe resaltar, como dato curioso, la coincidencia de que el 5 de julio, día en que terminamos el encuentro, se conmemoraban 120 años del nacimiento de Antoine de Saint-Exupéry, autor de “El Principito”.

Con algunas de las participantes al finalizar la actividad.

El programa del encuentro contemplaba actividades tanto sincrónicas como asincrónicas para facilitar que las asistentes pudieran participar adecuándose a sus horarios y a sus ritmos. De esta forma, tuvimos en directowebinars, workshops y hasta una clase de cocina con participación de algunas mamás; pero también, diseñamos una “Caja de herramientas” con videos, textos y recursos complementarios para las sesiones que las chicas podían revisar sin necesidad de conectarse con el resto. Todo esto, acompañado de retos que debían realizar a lo largo del fin de semana.

Con algunas de las participantes al finalizar la actividad.

Empezamos con el webinarDoctrina Social de la Iglesia: Solidaridad y Amistad Cristiana” a cargo de Beatriz Campillo Vélez, politóloga y filósofa de Medellín, quien dio la fundamentación teórica del tema muy profunda e interesante; y de Prince Martínez, quien lidera la Fundación Humana para Enseñar a Servir (FHES), que ofrece educación técnica en el sector hotelero, para mujeres de escasos recursos económicos en Cartagena. Ella contó, con el ánimo y alegría costeña que la caracteriza, su experiencia de trabajo por los más necesitados con una visión cristiana de la persona. Ambas intervenciones fueron inspiradoras para las niñas y les sirvió para abrir horizontes sobre el ejercicio de su profesión.

El webinar del sábado lo dictó Vicky Cabrera – psicóloga, profesora del Instituto de la Familia de la Universidad de La Sabana, a quien le apasiona la formación de los jóvenes -, sobre la “Regulación de emociones para fomentar relaciones sanas y duraderas”. A juzgar por los comentarios, sirvió profundamente a todas las niñas, quienes, pasados los días, no dejaron de comentar cuánto les había ayudado. Durante el webinar participaron activamente y solicitaron los datos de Vicky para contactarla.

Profundizamos en las enseñanzas de “El Principito” sobre la Amistad y la Solidaridad, a través tres workshops, el primero enfocado en la riqueza misma del libro en el cual se destacó el contexto histórico, social y cultural del libro y su autor; otro fue un cine foro -las participantes debía ver con antelación la película-, para profundizar aspectos especialmente valiosos de la amistad; y el último, invitaba a aprender a arriesgar y abrirse a los demás, empezando por cultivar la amistad con Dios.

También contamos con meditaciones, una de ellas sobre la amistad, que la dejamos aquí, por si los lectores también desean reflexionar en compañía de Dios sobre la Amistad, pues eso siempre puede ayudarnos a ser mejores amigos de nuestros amigos.

Luisa y Sandra Angélica al finalizar la clase de cocina.

A la clase de cocina, la calificamos como un reto en sí mismo. Pues, más que una invitación a cocinar fue una invitación a consentir a la familia con un delicioso postre. Además de preparar el Milky Way, las niñas, en compañía de otros miembros de sus familias, aprendieron de Luisa y Angélica, las expertas en el cuidado de la familia que dictaron la clase, cómo poner una mesa, incluyendo un detalle decorativo, para que, a través de estos actos, las niñas aprendieran el valor de las cosas pequeñas, enseñanza esencial de San Josemaría. Así, a través del “Reto de hacer Feliz a la familia” les contaran a todos en su casa la experiencia que vivieron ese fin de semana.