Misa en Lo Vásquez

Familias de Valparaíso, Melipilla, Santiago y alrededores se reunieron a las 12 del día, este domingo en el Santuario de Nuestra Señora Purísima de Lo Vásquez para conmemorar los 40 años de la visita de san Josemaría Escrivá.

La fachada del Santuario de Nuestra Señora Purísima de Lo Vásquez durante la misa de este 13 de julio.

Hace 40 años, san Josemaría visitó Chile, y entre sus múltiples actividades, fue al santuario de la Virgen, en Lo Vásquez, para pedirle a nuestra Madre por la Iglesia, por sus intenciones y por Chile.

Para conmemorar el aniversario de su visita, el pasado domingo 13 de julio se celebró una Santa Misa en el mismo santuario.

Una hora antes de la Eucaristía, comenzaron a llegar las familias, que venían desde los alrededores, de Valparaíso, Santiago, San Fernando, Melipilla... La mayoría no estuvo o no había nacido cuando el fundador del Opus Dei visitó nuestro país. Se unieron a los feligreses que habitualmente acuden a medio día a la Misa dominical y juntos llenaron la iglesia que se hizo pequeña para los participantes.

El celebrante, padre Alejandro González, siendo universitario, estuvo con el fundador del Opus Dei en el mismo lugar en 1974. En la homilía, recordó ese 8 de julio, cuando san Josemaría, acompañado de muchas familias y personas cercanas a la Obra rezó el Santo Rosario de rodillas y mirando cariñosamente a la Virgen "parecía como si estuviera conversando con ella", dijo.

El Pbro. Alejandro González y un grupo de fieles antes de comenzar la Misa.

A raíz de que el 13 de julio celebramos la fiesta de santa Teresa de Los Andes, recordó que en el santuario habían estado dos santos: Teresita de los Andes, la primera santa chilena y san Josemaría.

Continuó la prédica transmitiéndonos cómo él se había emocionado con la piedad y el amor de los chilenos a la Virgen María y dijo que "difundiría por todo el mundo, que los chilenos saben rezar".

Al terminar la Santa Misa, la gente se notaba muy contenta y conmovida, tanto quienes acompañaron a san Josemaría en su romería hace 40 años, como también los más jóvenes, quienes se dieron cuenta del impulso que supuso la venida de este gran santo a nuestro país y de su cariño a Nuestra Madre del cielo.

Familias fueron los principales grupos que asistieron a la Sagrada Eucaristía.