Tema 24. La unción de los enfermos
Para un cristiano la enfermedad y la muerte pueden y deben ser medios para santificarse y redimir con Cristo; a esto ayuda la Unción de los enfermos.
Un hospital en Eslovaquia
Jana, es madre de tres niños y vive en Bratislava. En este artículo, cuenta cómo puso en marcha un hospital en su país, motivada por las enseñanzas de san Josemaría.
Cuando la fragilidad baila
Desde 1964 Isabel Albors es profesora de ballet en Santa Cecilia, su propia escuela, pero a mediados de los noventa descubrió el que ha sido el mejor proyecto de su carrera, cuando algunos niños con necesidades especiales empezaron a ser alumnos de Santa Cecilia.
Un hijo cabal del beato Álvaro del Portillo
“Estoy seguro: ¡Toni es un santo!”. Repetidas veces se refirió el beato Álvaro del Portillo a Toni, con estas o parecidas palabras, cuando él ya estaba cercano a la muerte.
Cómo cuidar a los enfermos en la familia
"El primer hospital es el propio hogar", afirmó el Papa Francisco en la Audiencia que dedicó al cuidado de los enfermos en la familia. Dijo que a los hijos hay que enseñarles a ser solidarios con los miembros más débiles de la familia y evitar que se "anestesien” ante el sufrimiento de los demás.
Mi familia me ayuda en todo
Xavi tiene 19 años y es el más pequeño de una familia de nueve hermanos. Cuando tenía tres años fue diagnosticado de una distrofia muscular degenerativa y, desde entonces, sus capacidades físicas han ido mermando.
El beato Álvaro y su cariño por los enfermos
Durante los siete años que vivió en Roma, Marcela fue operada varias veces, lo que le permitió atestiguar de primera mano el especial cariño y preocupación que el beato Álvaro tuvo por los enfermos.
El Opus Dei nació entre los pobres y los enfermos
Durante un encuentro familiar en Suiza, el beato Álvaro del Portillo recordó cómo san Josemaría empezó el Opus Dei.
"¡Vale más que el oro!"
Lucía participó recientemente en el "Incontro romano", una actividad que reúne en Roma a jóvenes que se especializan en las profesiones relacionadas con el cuidado de la casa y los enfermos. Las participantes regalaron al Papa Francisco un frasco de dulce de leche.
Pídeme la Luna y te la intentaré alcanzar
“Ésta es una historia sencilla, pero no es fácil de contar. Como en una fábula, hay dolor, y, como una fábula, está llena de maravillas y de felicidad”. Así comienza la película La vida es bella, y así arranca esta historia de héroes anónimos: los niños hospitalizados en la planta de Oncología del Hospital Infantil de Jaén, sus familias, el personal sanitario y los miembros de la Asociación Pídeme la Luna.









