“No será fácil, pero valdrá la pena”

La vida de Cande y Luisma dio un giro inesperado con la noticia de la llegada de Rochi, su tercera hija. El diagnóstico de los médicos fue desolador, y la solución que proponían no era una alternativa para esta familia. Tras largos años de diálisis y dos trasplantes, hoy Rochi tiene 8 años, Trisomía 21 y una vida muy feliz. Con su testimonio, Cande y Luisma buscan transmitir la necesidad de lograr una sociedad más justa y con más amor, donde las discapacidades sean tenidas en cuenta y abrazadas con respeto.