Gustavo, España: «Dios me propuso un plan más original que el mío»
Gustavo iba a ser notario pero descubrió -gracias en parte a su vocación al Opus Dei- que lo suyo era el mundo de la comunicación. Ha trabajado con marcas como Warner Music, L’Oreal, Vocento o Bankinter y con artistas y personalidades como Alejandro Sanz, Chambao, Miguel Bosé… y el Papa Benedicto. Gustavo fue la persona que convenció al Vaticano de que abrieran una cuenta en Twitter. Dice que el día más feliz de su vida es cuando Pontifex lanzó su primer tuit.
Ana Cecilia, Brasil: «Descubrí que mi sueño podía multiplicarse»
Desde su infancia en Curitiba hasta su entrega en el Opus Dei, Ana Cecília ha recorrido un camino de autodescubrimiento. A través de la medicina y su relación con Dios, encontró su propósito: transformar vidas y multiplicar su sueño de maternidad en el servicio a los demás.
Eva: «Descubrí que mi vocación es transformar casas en hogares»
Yo soy Eva, soy del barrio de Horta, de Barcelona, y soy numeraria auxiliar. Tengo 34 años y me encanta la montaña, salir a correr... Me desfoga, me relaja. Me gusta muchísimo la naturaleza. Me gusta leer, escribir, salir con los amigos... Todo el tema de la moda, no sé, estar al día de todo. ¡Me falta tiempo!
«Seguir la propia conciencia es lo mejor para una institución sana»
Mariana, oriunda de Salta (Argentina), estudió Comunicación Social y trabajó como fotógrafa, pero actualmente se dedica a la jardinería. Para ella, su labor profesional es un espacio en el que puede encontrarse con Dios en cada situación. También cuida de su madre, que está en cama desde que hace dos años sufrió un accidente cerebrovascular.
Rosaura: «Pasamos de las energías a la verdad de Cristo»
La conversión de los padres de Rosaura cambió radicalmente el ambiente que se había respirado en su hogar durante años. En su familia pasaron de vivir una espiritualidad New Age a encontrar a Cristo. Tanto ella como su madre, que falleció en 2024, cuentan su camino de vuelta a la Iglesia y su vocación al Opus Dei como supernumerarias.
María José, España: «Para mí, ayudar a los demás es devolver lo que he recibido»
María José es abogada y reside con su marido y su hijo en Madrid. Desde el regreso del régimen talibán a Afganistán, en agosto de 2021, ayuda a mujeres de este país a encontrar asilo en España. Comenzaron siendo unas pocas, hoy es una red que apoya a 110 familias. “Rezar ayuda a integrar cada aspecto de mi día”, comenta. Su fe le lleva a comprometerse por mejorar, desde su trabajo, la realidad que le rodea.
Javier, España: «Lo decidí con alegría y nunca me he arrepentido»
Javier descubrió el Opus Dei a los 17 años y tomó la decisión de ser numerario con convicción y libertad. Sin embargo, la vida lo llevó por otro camino, demostrando que las decisiones, aunque cambien, siempre dejan aprendizajes valiosos.
Irene, España: «Pienso que, ahora mismo, en el Opus Dei, se cuenta mucho con los exmiembros»
Irene Rivero perteneció al Opus Dei como numeraria ocho años. Hoy es supernumeraria y ha querido compartir su reflexión sobre su discernimiento vocacional y algunas cuestiones conflictivas sobre la salida del Opus Dei.
Tiago, Portugal: «Busco aprovechar al máximo la vida»
Tiago es de Oporto, trabaja como ingeniero mecánico y le encantan las competiciones de coches. Con 20 años perdió a su abuelo y esto le hizo cuestionarse muchas cosas. Un amigo que falleció en un accidente ese mismo verano, le habló por primera vez del Opus Dei. El descubrimiento de la oración fue el inicio de un camino que le llevó a discernir su vocación a la Obra como numerario.
Mercè, Girona: «Es su vida, no la mía»
Mercè nunca imaginó que su hija Laura se uniría al Opus Dei. Al principio fue un disgusto, lleno de dudas y miedos. Pero con el tiempo, aprendió que la felicidad de su hija era lo único que realmente importaba.