Número de artículos: 762

Tema 10. La Pasión y Muerte en la Cruz

Jesús murió por nuestros pecados (cfr. Rm 4,25) para librarnos de ellos y rescatarnos para la vida divina.

Tema 11. Resurrección, Ascensión y Segunda venida de Jesucristo

La Resurrección de Cristo es verdad fundamental de nuestra fe como dice San Pablo (cfr. 1 Co 15, 13-14). Con este hecho, Dios inauguró la vida del mundo futuro y la puso a disposición de los hombres.

La puerta de la humildad

"Venid a mí, que soy manso y humilde de corazón". Dios se ha hecho pequeño, para que podamos ser grandes, con la grandeza verdadera: la humildad de corazón.

Tema 12. Creo en el Espíritu Santo. Creo en la Santa Iglesia católica

El Espíritu Santo une íntimamente a los fieles con Cristo de modo que forman un solo cuerpo, la Iglesia, donde existe una diversidad de miembros y funciones.

Tema 13. Creo en la Comunión de los santos y en el perdón de los pecados

La Iglesia es communio sanctorum: comunidad de todos los que han recibido la gracia regeneradora del Espíritu por la que son hijos de Dios y hermanos de Jesucristo.

Tema 14. Historia de la Iglesia

La Iglesia continúa y desarrolla en la Historia la misión de Cristo, impulsada por el Espíritu Santo. En la historia de la Iglesia se da un entrelazamiento entre lo divino y lo humano.

Tema 15. La Iglesia y el Estado

La salvación realizada por Cristo, y consiguientemente la misión de la Iglesia, se dirige al hombre en su integridad, y por tanto como persona que vive en sociedad.

Tema 16. Creo en la resurrección de la carne y en la vida eterna

Esta verdad afirma la plenitud de inmortalidad a la que está destinado el hombre; constituye por tanto un recuerdo de la dignidad de la persona, especialmente de su cuerpo.

Tema 17. La liturgia y los sacramentos en general

La liturgia cristiana es esencialmente actio Dei que nos une a Jesús a través del Espíritu (cfr. Ex. Ap. Sacramentum caritatis, n. 37).

Tema 18. El bautismo y la confirmación

El bautismo otorga al cristiano la justificación. Con la confirmación se completa el patrimonio bautismal con los dones sobrenaturales de la madurez cristiana.