Opus Dei

El pasado 14 de julio, mi tercer hijo se amputó prácticamente la mano trabajando con una amoladora. La cantidad de sangre que perdía era enorme. Otro de mis hijos, presente en la casa, llamó a la ambulancia y mientras tanto, yo comencé a pedirle a Isidoro que mi hijo no se muriera, aún sabiendo que es muy poco el tiempo que tenía para que lo asistieran.

Hace un tiempo que le pido ayuda a D. José María Hernández Garnica con las pequeñas cosas de orden material que tengo que resolver. Para mí no son tan pequeñas porque no estoy capacitada para colocar un tornillo, poner en funcionamiento un electrodoméstico o colocar una puerta corredera que se ha salido de su engranaje... y vivo sola.

Para recordarlo, se ha organizado en Suiza un acto conmemorativo.

Dije a Dora que, si me concedía este favor, lo iba a escribir con todos los otros que me ha hecho. Como Dora nunca te abandona, dicho y hecho: me lo concedió. Por eso, paso a escribir los favores ordinarios que Dora me concede. Perdí una de mis perlitas y la busqué por todos lados sin encontrarla.

Mi amigo me explicó que ser constante porque con la oración –me explicó– no pasa como con las máquinas de autoventa: con una moneda (una estampa) sale un producto (un favor). Pero se "equivocó".

Trabajo para un diseñador de moda. En el mes de marzo me planteé cambiar de trabajo y empecé la búsqueda de un nuevo empleo... En este punto de la historia entra Guadalupe Ortiz de Landázuri.

Se me acababa el tiempo para solucionar un problema, y Montse tuvo un detalle en su santo,

Se estudiará conjuntamente la posible elevación a los altares del matrimonio Ortiz de Landázuri.

Ya está disponible la primera hoja informativa de la sierva de Dios Dora del Hoyo. Descargue pdf.

​Quiero narrar algunos favores. El primero fue encontrar 20 € que creía perdidos. Aparecieron debajo de una estampa de Dora.