El beato Álvaro, los jóvenes y la paz
Ante la cercanía de la Jornada Mundial de la Juventud que se desarrollará en Panamá del 22 al 27 de enero de 2019, ofrecemos una homilía predicada en Roma por el beato Álvaro del Portillo en 1985 con ocasión del Año internacional de la Juventud.
Apartamento en Varsovia
Mi hija y su marido decidieron irse a vivir a Polonia, un lugar muy lejos de nuestra casa.
Desapareció la enfermedad
Había aparecido una mancha grande en el páncreas y debía hacerme una biopsia.
El diagnóstico fue benigno
Parecía un tumor cerebral y empezamos a encomendárselo a don Álvaro.
Hizo que terminase la carrera
El final de mi licenciatura se complicó porque no tenía dinero para pagar la matrícula.
Me curé de un tumor
En mi vida he recibido varios favores del beato Álvaro del Portillo, todos importantes, pero este último es la cumbre de los favores recibidos.
Nuestro benjamín no tuvo complicaciones
Mis tres hijos anteriores habían nacido antes de tiempo y debieron permanecer ingresados durante semanas.
Salvó los contactos de mi celular
El móvil había muerto, pero se llevaba con él todos mis contactos y eso no podía permitirlo.
Se curó de la leucemia
Con 35 años y tres niños se le diagnóstico leucemia, así que se lo encomendé a don Álvaro.
Un parto natural bajo la bendición y protección de don Álvaro
El bebé estaba en posición transversal, con un peso aproximado de 3.200 kg, lo que complicaba el parto.