
Nació como proyecto de solidaridad en 1998 y se consolidó en 2002 con motivo de la canonización de san Josemaría. Braval, desde sus inicios en el barrio del Raval de Barcelona, promueve la cohesión social, lucha contra la marginación, y previene la exclusión social de los jóvenes, además de facilitar la incorporación de los inmigrantes a la sociedad. Durante estos 25 años ha acompañado a 1.600 jóvenes.