Se fue el dolor
El motivo de estas líneas es para comunicarle que, otra vez, he sido ayudada por medio de la oración al querido Monseñor Josemaría Escrivá de Balaguer.
Adiós al dolor
Desde noviembre de 1991 el médico diagnosticó flebitis en la pierna izquierda. Mi trabajo consiste en atender el servicio doméstico en varias casas, por lo cual trabajo varias horas al día y suelo caminar mucho y estar de pie continuamente. A veces estoy hasta 16 horas de pie.
Uno detrás de otro
Si hay ocasiones en las que uno puede "tocar" la gracia de Dios o la ayuda patente de los santos, las que siguen son un buen ejemplo
A un metro de la boca de la tormenta
Un sábado de noche muy lluvioso iba en auto al cumpleaños de un amigo. Al llegar estacioné, abrí la puerta y se me cayó la llave del coche, que desapareció en el chorro de agua que corría al lado del cordón de la vereda.
Con la llave equivocada
Estaba pasando unos días en el campo, con mis hijos. Era verano y hacía muchísimo calor. De pronto comenzó una tormenta de viento frío y abrí todas las ventanas de la casa para que refrescara.
Doce en el oral
Me encontraba en el liceo donde había concurrido a rendir un examen de Geografía, animando a compañeros que aún debían presentarse a la prueba oral.
Respuesta inmediata
Tengo un nieto que quiere casarse desde hace ya algún tiempo. Con el sueldo que ganaba en su trabajo le resultaba prácticamente imposible plantearse la posibilidad del casamiento.
Favor doble
En febrero de 1989 había fallecido mi suegro y mi esposa estaba muy deprimida. En mayo tuvimos una gran alegría: estaba embarazada de nuestra segunda hija, María Belén. Le habíamos rezado al Fundador del Opus Dei. Poco tiempo después el embarazo comenzó a complicarse...
Cambio de actitud
Dos años atrás, hubo un cambio en la dirección de la empresa en la que trabajo desde hace 18 años, con la llegada de un nuevo gerente general.
Confesiones en el jubileo de 2000
El 28 de marzo de 2000 mi difunto padre hubiera cumplido 90 años. Por tratarse del Año Santo, animé a todos mis parientes a asistir a la Santa Misa que habitualmente se celebra en la iglesia del Cordón, donde se podía lucrar el Jubileo