Proceso de canonización de don Álvaro en Roma
La diócesis de Roma terminó de recoger los testimonios de personas que conocieron a don Álvaro del Portillo. Antes de mandar la documentación al Vaticano, se celebró un acto de clausura recientemente en el vicariato. Ofrecemos un vídeo resumen.
El cardenal Ruini define a don Álvaro como “ejemplo de santificación en la vida ordinaria”
El cardenal Camillo Ruini, Vicario del Papa para la Diócesis de Roma, ha presidido la sesión de clausura del proceso diocesano sobre la vida y las virtudes de Monseñor Álvaro del Portillo (1914-1994), Prelado de Opus Dei.
Concluye en Roma la fase diocesana de la causa de canonización de don Álvaro del Portillo
El próximo jueves 26 de junio, en el Palacio del Laterano, el cardenal Camillo Ruini presidirá la sesión de clausura del proceso diocesano sobre la vida y las virtudes del Siervo de Dios Álvaro del Portillo (1914-1994), obispo y prelado del Opus Dei.
Homilía en la Misa por don Álvaro del Portillo
Palabras que el Prelado del Opus Dei ha pronunciado en la basílica de San Eugenio (Roma), en el 13 aniversario del fallecimiento de don Álvaro del Portillo.
“El impulso de Juan Pablo II y don Álvaro del Portillo me ayudó mucho en mi trabajo”
Ana María Álvarez, especialista en pediatría oncológica y fundadora de Andex (Asociación de Padres de Niños Oncológicos)
Recuerdo de don Álvaro del Portillo
VÍDEO: Un 23 de marzo de 1994 falleció en Roma don Álvaro del Portillo, sucesor de San Josemaría. Ofrecemos un vídeo de su visita a Boston (EE.UU.) en 1988. Allí habló sobre la santificación de trabajo. Duración: 2'53''.
Un "pastor ejemplar" de sonrisa amable
"La sonrisa amable de Álvaro del Portillo, primer sucesor de san Josemaría Escrivá al frente del Opus Dei, fue evocada ayer por el vicario del Papa para la diócesis de Roma, Camillo Ruini". Así describe el acto el corresponsal en Roma del diario ABC.
Muerte de don Álvaro (23-III-1994)
El 23 de marzo de 1994 murió Álvaro del Portillo. El papa Juan Pablo II envió un telegrama de condolencia y quiso ir a rezar personalmente ante los restos mortales del primer sucesor de san Josemaría.