Durante la homilía, el Vicario Regional comentó que don Álvaro poseía una personalidad encantadora, que hacía especialmente agradable estar a su lado; como un don de gentes: “sabía acoger a todos, uno a uno, confortándoles con su interés, con su simpatía, con el servicio desinteresado con que aliviaba a las almas”.

También recordó que este rasgo, unido a su pasión por la unidad en la Iglesia –comunión con el Papa y los obispos-, le llevó a tener una gran amistad con san Juan Pablo II, el beato Pablo VI y con nuestro queridísimo Cardenal Aponte Martínez q.e.p.d

Al finalizar se hizo eco del deseo del Prelado sobre la conveniencia de releer y meditar la carta que el Papa Francisco escribió a don Javier en 2014 con motivo de la beatificación, que ayuda a comprender otros rasgos esenciales del primer sucesor de san Josemaría.

Si desea acceder a ella puede hacerlo a través del siguiente enlace: Carta del Papa a don Javier.

Participaron en la concelebración Mons. Ricardo Hernández, párroco y P. Juan Aramendi, Vicario Secretario Regional del Opus Dei en Puerto Rico.

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Adjuntamos video donde el beato Álvaro habla del perdón y la Misericordia de Dios.