Don Ernesto cuidó a nuestra bebé
Después de cuatro años de matrimonio conseguimos que llegara un embarazo que no estuvo exento de problemas. Gracias a la intercesión de Ernesto Cofiño, hoy nuestra hija Catalina está perfectamente.
Una nueva oportunidad de vivir
Gracias a la intercesión del Dr. Cofiño, ella tuvo una segunda oportunidad para vivir.
Cuidó mis venas
No tenían dónde pincharme, pues mis venas no se ven, son muy finas y se rompen con facilidad.
Curó uno de mis pulmones
Me hice una radiografía y uno de mis pulmones estaba completamente negro, lo había perdido.
Los riñones de mi sobrina
Tenía una insuficiencia renal grave y debía someterse a la diálisis.
Examen de reconocimiento del título de médico
Un amigo mío debía hacer un examen para acceder a una plaza en un hospital.
Mi intercesor para el estudio
Debía examinarme de una prueba muy dura y tenía poco tiempo para prepararme.
Mi oído izquierdo
«El domingo 13 de agosto, por la mañana me llamaron por teléfono y ‒suelo usar el auricular del lado izquierdo‒ para mi sorpresa, no escuchaba nada...». Así relata una mujer panameña un favor, que atribuye a la intercesión de Ernesto Cofiño.
Más que conseguir un hospital
Hace casi tres meses mi papá fue atropellado por un automóvil. Sufrió severas lesiones cerebrales y estuvo inconsciente y en peligro de muerte por casi veinte días.
Un bebé que no crecía
A las 12:15 recibí una llamada de mi esposa, casi ininteligible por el llanto, en la que me indicaba que "sacarían" a la nena porque los resultados de un examen de su corazón habían salido negativo.