Panamá, 31 de enero (2019): “No me despido pues estamos siempre unidos por la comunión de los santos”

Último día del Padre de su viaje pastoral por Panamá -para la JMJ-, Costa Rica y Nicaragua.

El 30 de enero, a las 7:45 pm llegó el Padre a Panamá procedente de Nicaragua. Le acompañaban, -aparte de los Custodes- el P. Carlos, Vicario Regional y Javier, de Beta Films. Le recibieron en el salón diplomático Miguel Ángel, José, Carles y Fernando. El Padre escribió unas líneas en el libro de visitas del salón diplomático de Panamá.

Mientras el Padre esperaba que se hicieran los trámites migratorios, varias personas que estaban allí fueron saludándole y conversando varios minutos con él: unos diplomáticos de República Dominicana, dos obispos, varios funcionarios de dicasterios de la Santa Sede. Todos ellos quisieron hacerse fotos con el Padre y él accedió gustosamente. Lo mismo pidió la persona encargada del salón diplomático.

El Padre pasó la noche en el Centro de Convenciones Cerro Azul, relativamente cerca del aeropuerto. Cuando llegó a Cerro Azul, alrededor de las 8:45 pm, pasó a saludar a fieles de la Obra que trabajan en la escuela hotelera Tagua -contiguo a Cerro Azul-, así como algunas de las alumnas que hacían sus prácticas de gastronomía esos días.

El jueves 31 a las 8:00 am, predicó la meditación, y celebró la Santa Misa en el oratorio de Tagua. En la meditación, comentó el evangelio del día, animando a las asistentes a ser luz, sal y levadura donde quiera que estén. Después de la Misa, el Prelado felicitó a Maricela, nicaragüense, que cumplía años. Lesbia, alumna proveniente de Soloy, Chiriquí, le regaló un rosario elaborado por ella misma, con semillas de la Comarca de Ngobe Bugle. Le contó al Padre que había hecho varios, para vender a las participantes de la JMJ, y así recaudar fondos para las becas de Tagua. Antes de irse, el Padre les dio la bendición, y dijo que no se despedía, pues en el Opus Dei estamos siempre unidos por la comunión de los santos.

A las 10:00 am salió el Padre rumbo al aeropuerto con los Custodes, el Padre Jorge y el Padre Vicente, y Javier. Les acompañaron el P. Carlos, Carles, Miguel Ángel, Giancarlos, José y Fernando. Al llegar al aeropuerto esperaron un rato largo en el salón diplomático. Allí se tuvo una agradable tertulia en la que todos fueron aportando anécdotas para hacer descansar al Padre. El Padre aprovechó un momento para leer un artículo que se había publicado en un diario costarricense sobre la JMJ y la Juventud. Al final, el grupo se tomó una foto con el Padre teniendo de fondo una bandera panameña. Cuando fue la hora, el grupo salió hacia la puerta de la “manga” que comunica con el avión. Tomaría un vuelo hacia Puerto Rico, siguiente destino de su viaje pastoral.