Fundación Espurna: trabajo y servicios para discapacitados

“Todo comenzó hace años, cuando nos planteábamos dar respuesta a las necesidades de nuestra hija Cristina, que tiene Síndrome de Down” cuenta el presidente de la Fundación José Pedro García Canet.

José Pedro García es supernumerario del Opus Dei. Una necesidad concreta de su familia le llevó a actuar con profesionalidad, poniendo los medios. Su hija Cristina tiene Síndrome de Down y él no encontraba un lugar donde prepararle para afrontar la vida.

"Entramos en contacto con las asociaciones que en aquel momento existían y que luchaban para mejorar la calidad de vida de estas personas. Sin embargo, nos dimos cuenta de que el proceso era lento y por eso nos planteamos crear una Fundación”. Podía haberse ahorrado el esfuerzo, pero él quiso poner todo su empeño, para dar a su hija y a otros muchos jóvenes una oportunidad.

LA FILOSOFÍA ES QUE "EL TRABAJO, DIGNIFICA"

En la actualidad la Fundación Espurna cuenta con un Centro Ocupacional donde trabajan y se forman 74 personas. Cuentan, además, con tres Viviendas Tuteladas en las que llevan vida independiente 14 personas.

La filosofía que hay detrás de estos logros es la de que el trabajo dignifica a la persona, también a la que tiene discapacidad. José Pedro García afirma: “Nosotros queremos que se nos valore por lo que somos capaces de hacer y que no nos pongan apellidos, porque estamos convencidos de que las personas con discapacidad pueden hacer un trabajo de calidad cumpliendo los plazos comprometidos".

"Por eso tenemos una especialidad, el trencadís -una técnica de mosaico centenaria que utilizó Gaudí-, en la que lo importante es la mano de obra, pero que requiere mucha constancia, dedicación y en la que no tenemos competencia”.

Esta forma de entender el trabajo de las personas con discapacidad tiene consecuencias, algunas muy evidentes: “Nuestro Centro Ocupacional, por ejemplo, es en realidad una amplia nave de 240 metros cuadrados igual a la de cualquier empresa, cuando se supone que, este tipo de labor es para grupos reducidos y, por eso, debería haber diferentes estancias. Pero nosotros vamos más allá de la simple ocupación de los usuarios”.

Charo García puntualiza: “Nuestra filosofía del trabajo no nos hace perder ni un momento de vista lo más importante: el bienestar y la superación personal de la persona con discapacidad. Más bien ocurre lo contrario, al trabajar y ver el resultado de su labor, ellos se sienten felices, están implicados y dicen eso es mío, lo he hecho yo”.

Muchas personas con discapacidad pueden trabajar a un ritmo adecuado y hacerlo bien, llevar una vida independiente en un piso tutelado, o viajar a otro continente. Ante la pregunta de hasta dónde podrían llegar las personas con discapacidad, la respuesta de Charo García es clara: “Hace unos pocos años los discapacitados psíquicos no salían de casa. Al principio los llevábamos a ver el mar porque no sabían lo que era. Ahora sabemos que son capaces de hacer muchas más cosas de las que la gente piensa, pero no podemos engañarnos creyendo que van a ser como una persona sin discapacidad. Las imágenes idílicas también distorsionan la realidad. Y a veces a las familias se les vende la idea de que su hijo va a poder superar su discapacidad y eso es falso”.

EL FUTURO

Las familias de las personas con discapacidad suelen preocuparse por el futuro de sus hijos. ¿Qué pasará cuando nosotros no estemos? Espurna pretende adelantarse a ese futuro ofreciendo respuestas.

“No es posible sustituir a la familia, pero aquí nos preocupamos por crear un ambiente lo más familiar posible. En el Centro el ambiente es muy bueno. Somos como una gran familia y por eso nos preocupamos por lo que pasará más adelante e intentemos ofrecer soluciones”, señala Charo García.

La responsable de Espurna apostilla: “De dar respuesta a esa necesidad surge nuestro proyecto de construir un Centro de Día y 14 Viviendas Tuteladas. Se trata de liberar a las familias durante alguna temporada, pero también de apostar por su vida independiente. Ahora mismo no sabemos de dónde va a salir todo el dinero para las viviendas, pero no nos podemos quedar parados. Así que, como ocurrió cuando surgió Espurna, hemos decidido arriesgarnos”.

ACTIVIDADES

Se realizan una gran variedad de deportes que practican los operarios de la Fundación en función de la capacidad de cada uno: fútbol sala, baloncesto, petanca, atletismo, pruebas adaptadas y natación, entre otros.

Entre las actividades culturales de la Fundación un grupo de teatro desarrolla las habilidades de comunicación de los participantes. También realizan manualidades, que permiten el desarrollo de habilidades y destrezas manuales. Quizá las más destacadas son el montaje de una falla para celebrar las tradicionales fiestas valencianas, junto con la ejecución de un belén que festeja la Navidad.

Mensualmente se realizan salidas de fin de semana para aquellos operarios que deseen aprovecharse de esta oportunidad. Estas actividades sirven para potenciar la capacidad de convivencia para cada uno de los operarios así como para darles un respiro a las familias con hijos disminuidos que necesiten un descanso algún fin de semana. A esto se le añade el campamento de verano que organiza la Fundación entre los meses de julio y agosto, en dos grupos que están cada uno de 15 a 20 días.

Más información: Fundación Espurna

San Ramón, 4

Gandia (Valencia)

Telf. 96 296 51 55

Fax: 96 296 58 64

e-mail: espurna@espurna.org