30.000 batallas ganadas a la miseria

Uno de los suburbios con más carencias de la zona metropolitana de la Ciudad de México es el Valle de Chalco. Con el impulso del Beato Álvaro un grupo personas puso en marcha dos escuelas, Meyalli y Acuautla, para niñas y niños respectivamente. Hoy educan a 1.500 jóvenes.

Uno de los suburbios con más carencias de la zona metropolitana de la Ciudad de México es el Valle de Chalco. Las condiciones de vida dejan mucho que desear. La falta de servicios públicos básicos y las pocas oportunidades educativas han orillado por décadas a su gente a empleos ocasionales sin estabilidad ni proyección. La educación no es ya sólo un derecho, sino necesidad urgente.

En medio de este panorama, en 1990 el Valle de Chalco recibió la visita de Juan Pablo II. «No podemos vivir y dormir tranquilos mientras miles de hermanos nuestros, muy cerca de nosotros, carecen de lo más indispensable para llevar una vida humana digna». Estas palabras dejaron profunda huella en un grupo de ciudadanos preocupados por el desarrollo de la zona. Y, alentados por el Beato Álvaro del Portillo, ese mismo año, en un terreno donado por el Gobierno del Estado de México en el municipio de Ixtapaluca, nace Educar, A.C., una institución comprometida con la sociedad, que ofrece educación integral a niños y niñas de escasos recursos, a sus familias y a sus profesores.

Enlaces: Colegio Meyalli / Centro Escolar Acuautla