Jan, Elizabeth, Jaime y Giovanni vinieron a Roma con un caudal de experiencia, un rico bagaje cultural que compartir y un modo propio de enfocar la vida. Ahora, años después, han terminado sus estudios y trabajan en una emisora de radio eslovaca, una agencia de información internacional, o una oficina de comunicación diocesana en Ecuador. Estudiaron comunicación en una naciente facultad universitaria que forma parte de la Pontificia Universidad de la Santa Cruz.
La Facultad de Comunicación Social Institucional "nació en 1996 -cuenta el actual decano, Norberto González Gaitano- con el propósito de servir a los obispos y a instituciones eclesiásticas de todo el mundo en las tareas de comunicación social. La Iglesia no es sólo sujeto de la Evangelización con sus medios específicos para comunicar el mensaje de salvación a todos. La Iglesia es también, inevitable y necesariamente, tema de información en cualquier medio de comunicación social. En los dos ámbitos necesita profesionales competentes".
"Las iniciativas en este campo son muchas y la nuestra es una más -afirma Mariano Fazio, primer decano de la facultad-. Como a tantos otros cristianos, nos mueve la ilusión de ofrecer una enseñanza universitaria de calidad al servicio de la Iglesia".
Revitalizar las culturas desde la fe
El programa de licenciatura de la facultad abarca cuatro años, en los que se integran materias teológico-filosóficas, humanísticas, de comunicación social, y de comunicación institucional de la Iglesia. Asignaturas como Teología moral fundamental o Eclesiología se complementan con Literatura y comunicación de la fe, Teoría e historia del cine, Retórica y otras más específicas como Opinión pública, Comunicación audiovisual o Media relations, con el fin de proporcionar a los alumnos las herramientas intelectuales necesarias para su tarea informativa.
Se trata no solamente de conocer las técnicas adecuadas de comunicación sino de integrar el mensaje cristiano en el mundo contemporáneo, hacerlo inteligible también a los medios de comunicación, y descubrir su potencia como motor configurador de las culturas del siglo XXI. Las basílicas romanas, el arte medieval, la música sacra, la literatura espiritual o las ceremonias litúrgicas muestran que la Iglesia lleva más de veinte siglos transmitiendo el mensaje que ha recibido: para la Iglesia, comunicar no es algo nuevo, sino una larga tradición.
El mundo profesional
Periódicamente los estudiantes tienen encuentros con profesionales de la comunicación que comparten las experiencias de su trabajo y responden a sus preguntas. En estos años han pasado por la facultad decenas de periodistas, portavoces, directores de oficinas de información y oficinas de prensa, productores televisivos, corresponsales. Por citar solamente algunos: Dennis Redmont (Associated Press), Alessandra Stanley (New York Times), Dino Boffo (Avvenire), Leonardo Mondadori (Editorial Mondadori), Luigi Accatoli (Corriere della Sera), Ettore Bernabei (productora Lux), Heriberto Schoeffer (presidente de IMMI Productions, Hollywood), Ludwig Ring Eifel (Agencia de noticias KNA), Orazio Petrosillo (Il Messaggero), Alan Albarran (Editor de The Journal of Media Economics), Stefano Lucchini (Director de Comunicación de Confindustria, Italia), Giancarlo Polenghi (directivo de la agencia de publicidad MCM, de Florencia)...
Los encuentros ayudan a entender los problemas que afrontan los periodistas a la hora de informar sobre cuestiones religiosas, y permiten también aprender de otros profesionales de la comunicación y oficinas de prensa. Sirven de preámbulo a la práctica profesional que se exige de cada alumno durante los meses de verano. En efecto, como complemento de las actividades académicas, los estudiantes realizan durante las vacaciones un periodo de prácticas en alguna institución o medio de comunicación. En estos años, han trabajado en la oficina de información de la Jornada Mundial de la Juventud (Italia), Radio Sololá (Guatemala), Vatican Information Service (Ciudad del Vaticano), Catholic Information Center (USA), Eternal World Television Network (USA), La Voce del Popolo (Italia), o la Oficina de Información del Santuario de Torreciudad (España).
La Facultad de Comunicación Social Institucional es aún muy joven, y quizá por eso sueña despierta con un gran desafío: buscar formas profesionales de transmitir un gran tesoro, el tesoro de la fe, mostrando su perenne novedad.
Juan Pablo II: difundir la Buena Nueva a toda la sociedad
El Papa Juan Pablo II recibió en audiencia a los profesores, alumnos y personal administrativo de la Pontificia Universidad de la Santa Cruz en mayo de 1999. El Pontífice, en el discurso que pronunció en esa ocasión, dijo refiriéndose a la Facultad de Comunicación que "noto con aprecio que vuestra universidad, respondiendo a una precisa necesidad del mundo contemporáneo, es decir, la de impulsar, con competencia profesional y sentido eclesial, al sector de la opinión pública y de los medios modernos de comunicación social a tener una comprensión cada vez más adecuada de la riqueza que brota de la vida de la Iglesia, ha proyectado la facultad de Comunicación Social Institucional, con la finalidad de formar de modo específico a personas que colaboren con los obispos, con las Conferencias Episcopales y con otras instituciones eclesiales en la transmisión de una correcta información sobre la Iglesia mediante los medios de comunicación social. Se trata de una iniciativa que tiene en cuenta las actuales exigencias de la comunicación. Deseo de corazón que vuestro esfuerzo favorezca la difusión y la inculturación del Evangelio, buena nueva de liberación auténtica, en todos los sectores de la vida social y civil".
La Universidad de la Santa Cruz
La Pontificia Universidad de la Santa Cruz es una institución de investigación y estudio de las ciencias eclesiásticas, erigida por la Santa Sede y constituida por las facultades de Teología, Filosofía, Derecho Canónico y Comunicación Social Institucional, y por el Instituto Superior de Ciencias Religiosas all'Apollinare. Las facultades ofrecen los tres ciclos del curriculum universitario, otorgando los grados de Bachiller, Licenciado y Doctor.
La Universidad tiene su origen en el deseo del beato Josemaría, fundador del Opus Dei, de promover en Roma un centro universitario de investigación y formación en Ciencias eclesiásticas, al servicio de toda la Iglesia. Está confiada a la Prelatura del Opus Dei y el Gran Canciller es Mons. Javier Echevarría, Prelado del Opus Dei.
La Universidad sale adelante gracias a la generosidad de muchas personas que buscan y contribuyen con sus donativos al fondo de becas de estudio y alojamiento para los estudiantes. Con frecuencia esas ayudas dan fruto a miles de kilómetros del lugar de proveniencia, quizás en el otro extremo del globo, donde los graduados trabajan como profesores de seminario, delegados de medios de comunicación, profesores de facultades eclesiásticas, párrocos, abogados en las curias diocesanas, o en otros ámbitos pastorales.