El director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Joaquín Navarro-Valls, efectuó esta mañana la siguiente declaración sobre el estado de salud actual del Santo Padre:

"La laringo-traqueitis aguda está en fase de remisión y no se han repetido los laringo-espasmos que motivaron la hospitalización urgente. El Santo Padre ha pasado una noche tranquila".

Navarro-Valls llegó al Policlínico Gemelli esta mañana poco después de las 9. Tras haber visitado al Papa en su habitación se encontró con los periodistas y les dijo que "el Santo Padre había pasado una noche tranquila y que los análisis eran satisfactorios". Después comentó que "serán los doctores quienes decidan" cuanto tiempo debe permanecer el Papa en el Gemelli" y que según su propia experiencia se trataría "de unos siete días".

Al Policlínico Gemelli, donde Juan Pablo II ingresó en la noche del martes, están llegando mensajes de todo el mundo, en los que se aseguran oraciones por el Santo Padre y se le desea un rápido restablecimiento.

Un sacerdote y una monja polacos que formaban parte de un grupo de más de 700 peregrinos de esa nacionalidad, llegados a Roma para la audiencia de ayer miércoles, que fue suspendida a raíz del estado de salud del Papa, entregaron en el Gemelli un ramo de rosas blancas y rojas, los colores de la bandera polaca. Los peregrinos se reunieron para rezar en la Plaza de San Pedro, mientras diversos polacos residentes en Roma han emprendido una peregrinación a San Giovanni Rotondo, santuario de Padre Pío. En numerosas iglesias romanas -incluida San Estanislao, la iglesia de los polacos- hay vigilias de oración por la salud del Pontífice.

También han llegado al Gemelli 15 rosas rojas enviadas por una delegación de residentes de los pueblos construidos en los terrenos adyacentes al campo de concentración de Auschwitz y ahora territorio polaco.